Si bien Microsoft ha ido reduciendo gradualmente la utilidad y las funciones de Kinect en todas sus plataformas, las noticias de hoy en día igualmente son una sorpresa. La compañía anunció hoy a Co.Design que ha concluido la fabricación del dispositivo, por lo cual dejará de estar a la venta.
Esto no quiere decir que el Kinect fuera un fracaso en sí mismo. La tecnología fue revolucionaria; el producto, sin embargo, no despegó como la firma esperaba. Según Co.Design, Microsoft ha vendido alrededor de 35 millones de Kinects desde 2010. El dispositivo recibió un gran impulso cuando se acopló con la Xbox One en el lanzamiento de la consola, pero en Redmond se vieron obligados a lanzar una versión de la terminal sin la cámara debido al elevado precio.
La tecnología de Kinect seguirá viva en diversas formas, incluido, sorprendentemente, en el iPhone X, ya que Apple adquirió PrimeSense, la compañía israelí que creó la tecnología 3D en la versión original de Kinect. El iPhone X utilizará los algoritmos de PrimeSense en el sistema Face ID de la cámara de detección de profundidad. Además, Microsoft también está trabajando en Hololens, que fue desarrollado por el creador de Kinect, Alex Kipman. Este lente de realidad mixta usa también un sensor Kinect.
Vía: Engadget
