Nokia publicó su informe financiero correspondiente al segundo trimestre de 2012 con números realmente preocupantes. La firma finlandesa reveló una pérdida operativa total de 826 millones de euros (alrededor de mil millones de dólares), una cifra inferior a las mostradas en el primer trimestre (donde la pérdida fue de casi 1.600 millones de dólares) pero que, de todas maneras, enciende las alarmas dentro de la compañía.
La alianza con Microsoft, si bien no ha sido un fracaso y reporta buenas ventas, sigue sin dar los resultados esperados. La línea Lumia duplicó sus números y alcanzó las 4 millones de unidades vendidas durante el segundo trimestre, pero no logró aumentar significativamente su cuota de participación dentro del mercado estadounidense (uno de los principales objetivos de la empresa) ya que sólo distribuyó en este territorio 600.000 equipos.
Por otro lado, una gama que goza de buena salud es la de terminales económicas, que tiene como bandera a la serie Asha y ha vendido un total de 83.7 millones de teléfonos, frente a los 82,7 vendidos el trimestre anterior.
Aún así, el dinero en efectivo de la compañía comandada por Stephen Elop continúa en franco descenso, con unos 5.100 millones de dólares en reservas que representan una “ligera” disminución frente a los 6.300 millones del primer cuatrimestre. La hemorragia financiera ni siquiera ha podido ser detenida con el pago de otros U$S250 millones aportados por Microsoft. Así, frente a la disminución de las reservas, la empresa pondría la mira en su portfolio de patentes para lograr el sustento financiero.
Con este panorama ¿Cuáles son las expectativas para el tercer trimestre? Nokia espera un desempeño similar al de los dos primeros trimestres de 2012. Según sus predicciones “será un trimestre difícil en dispositivos inteligentes, debido a la transición de productos”, situación que será profundizada por la migración ya decidida desde Symbian y MeeGo hacia Windows Phone (plataforma que tal vez atraviese más de un conflicto con los problemas de compatibilidad entre las versión 8 y sus predecesores).
Elop, mientras tanto, se muestra optimista respecto a las perspectivas de la compañía a largo plazo. En un comunicado sostuvo: “Estamos llevando a cabo con celeridad nuestro programa de reestructuración, deshaciéndonos de activos no estratégicos como Vertu y tomando las medidas necesarias para equilibrar las operaciones de la firma.” El CEO explicó además que los empleados de Nokia han demostrado su determinación para fortalecer la competitividad, mejorar el modelo operativo y administrar cuidadosamente los recursos financieros. ¿Será suficiente para, finalmente, encausar el rumbo?
Fuentes: TheVerge.com, Engadget.com, WSJ.com