Las medallas que serán utilizadas para la premiación de los atletas en las próximas olimpiadas de Tokio 2020 ya han sido presentadas al público. El diseño cumple con la simbología clásica de las olimpíadas modernas, incluyendo los aros que representan a los continentes y las imagen de la diosa de la victoria, Nike.
Sin embargo lo más destacado de las medallas olímpicas es el origen de sus materiales. Más de 6 millones de dispositivos móviles reciclados han contribuido con más de 78 mil toneladas de basura electrónica para la creación de las condecoraciones.
Según cálculos oficiales lo recolectado es suficiente para fabricar las 5 mil medallas que se repartirán durante los juegos. En esto se incluye 32 kilogramos de oro, 3.500 kilogramos de plata y unos 2.200 kilogramos de bronce.
El material incluso permitirá la creación de premios para su uso en competencias locales.
La campaña
Para obtener el material se contó con la colaboración de unos 1621 municipios de Japón. El material provisto se obtuvo principalmente de dispositivos móviles, pero también de otros electrónicos pequeños. Las tiendas de NTT docomo, el principal operador de telefonía móvil de Japón, fueron los nodos elegidos para la campaña.
El reciclado tiene como objetivo crear consciencia sobre el impacto medioambiental que tiene la actual industria de dispositivos móviles y la importancia de establecer políticas que solución el problema. Según datos de las Naciones Unidas cada año se generan 50 millones de toneladas de basura relacionadas con esta actividad.