Londres es una de las capitales financieras del mundo y tiene planeado seguir siéndolo. Para lograr esto tiene que estar a la vanguardia de cualquier movida importante que pueda darse en el sector. Uno de los fenómenos sobre el que las autoridades británicas han puesto el ojo son las criptomonedas. Quizás este no parezca el mejor momento para apostar por las divisas digitales, pero a largo plazo podría ser una buena estrategia.
Hace poco el Tesoro del Reino Unido anunció su intención de regular a las stablecoins para que puedan ser utilizadas como forma de pago. El objetivo era fomentar el desarrollo de las compañías de pagos digitales.
Al rescate
Una enmienda a la ley británica que regula los mercado financieros haría que las criptomonedas queden bajo la jurisdicción del banco central. Esto le permitiría a la institución intervenir cuando una stablecoin se derrumbe. Según el Banco de Inglaterra, tal acción se llevaría a cabo solo en caso de que hubiera riesgo para la estabilidad del sistema financiero del Reino Unido o hubiera consecuencias significativas para negocios y otros intereses.
Las atribuciones dadas a la entidad son poco claras, los documentos mencionan supervisión y dirección.
A la luz de la carrera por las CBDC
Las atribuciones dadas al banco central deben considerarse también a la luz de una de las misiones que se la han dado recientemente: El estudio sobre la viabilidad de una stablecoin oficial, una CBDC. Según la directora del FMI unos cien países están considerando crear sus propias stablecoins vinculadas a bancos centrales.