Cuando El Salvador decidió adoptar al Bitcoin como una moneda oficial se convirtió en escenario de un gigantesco experimento que podría ofrecer algunas pistas sobre el futuro de la criptomoneda. Ciertamente cada país tiene sus propias peculiaridades y no podemos trasladar los resultados de forma automática, pero los datos siguen siendo interesantes. La información sobre lo ocurrido en dicho país nos llega gracias a un trabajo de investigación realizado por Fernando Alvarez, David Argente y Diana Van Patten. La publicación del mismo se ha realizado en Science.
Método
Los investigadores realizaron encuestas presenciales en más de 1800 hogares. Además, analizaron todas las transacciones en las que estuvo involucrada la Chivo Wallet, la billetera digital impulsada por el gobierno. El objetivo era ver el nivel de adopción de la herramienta, así como también el perfil de los usuarios.
Adopción
Los investigadores descubrieron que el nivel de adopción de la billetera digital era bajo. La mayoría de las descargas de la aplicación se realizaron durante su lanzamiento, desde entonces solo han disminuido.
Los principales obstáculos para la adopción de la billetera digital han sido las preocupaciones vinculadas a la privacidad y la transparencia. Existe una gran desconfianza sobre quienes están encargados del sistema.
Usuarios
Otro detalle interesante es que a pesar de que las criptomonedas a menudo han sido vistas como parte de una solución ante la existencia de amplios sectores fuera del sistema bancario, no ha cumplido dicha función en El Salvador. La gran mayoría de los usuarios de las criptomonedas han sido personas de altos ingresos ya bancarizadas. Hombres jóvenes y con estudios son las figuras más comunes.
Observaciones
También se señaló que para una mayor adopción la población debería tener mayor educación financiera y los sistemas de monedas digitales deberían ser más confiables. El costo inicial al empezar a utilizar la tecnología es generalmente alto y los beneficios aumentan solo a medida que más gente la emplea. Esto hace que muchas empresas resistan su uso.