La automotriz Volvo acaba de hacer un anuncio relevante. Según dijo el presidente de la empresa, Hakan Samuelsson, a partir del año 2019 dejarán de fabricar coches con motor de combustión; de este modo, todos los vehículos que saldrán de sus plantas serán totalmente eléctricos o bien híbridos.
“La gente demanda coches eléctricos y nosotros vamos a responder”, afirmó el ejecutivo en un comunicado. “Este anuncio marca el fin de la combustión interna en nuestros vehículos. Volvo tiene en sus planes vender un millón de coches eléctricos para el año 2025”, agregó. Lo cierto es que Volvo se convierte en la primera automotriz tradicional en realizar un anuncio de este orden.
La información divulgada contempla, además, el lanzamiento de cinco modelos eléctricos entre 2019 y 2021, tres de ellos con la marca Volvo y dos con el emblema de Polestar, una de las filiales de la automotriz.
De origen sueco, Volvo es ahora propiedad de Geely Holding Group, un consorcio chino. Más allá de este vínculo con el mercado asiático, la empresa tiene profunda raíz en el viejo continente, plaza donde está allanado el camino para los vehículos de motorización eléctrica. Para dar cuenta del cambio de paradigma, en Suecia se vendió casi un 50 por ciento más de coches eléctricos durante 2016 en relación al año anterior.
Además de su profundización en el mercado de los eléctricos, Volvo también trabaja en coches autónomos; en esta línea se asoció con Google para la incoporación de Android en el navegador de estos automóviles, y también con Nvidia para la inyección de hardware en este tipo de vehículos que llegarían a las calles hacia el 2021.
Fuente: Engadget
Imagen: Volvo