Celsius una de las compañías más importantes del mundo de las criptomonedas ha presentado un recurso de protección por bancarrota. El mes pasado, luego de argumentar condiciones extremas en el mercado, había dejado de operar dejando a casi 2 millones de usuarios sin acceso a sus fondos. En Abril los tokens relacionados con la empresa habían caída a los USD 3, un año atrás se cotizaban a USD 7. Actualmente escasamente superan los USD 0,56.
Al borde del abismo
Celsius no fue la única empresa en sufrir la caída de las divisas digitales, pero probablemente sea una de las que peor preparada estaba. Ofrecía grandes rendimientos para los depósitos y préstamos sin exigir garantías de un nivel adecuado. Cuando las cosas se complicaron y comenzaron los retiros la empresa se encontró rápidamente en la necesidad de pausarlos. La compañía declaró que de no haberlo hecho los primeros clientes en retirar sus depósitos hubieran podido recibir un pago completo, pero los demás hubieran tenido que esperar un largo tiempo.
Si todo lo dicho suena familiar, es porque es un problema que ha ocurrido en el sistema bancario con anterioridad. En Argentina en más oportunidades de las que nos gustaría recordar, en el mundo en particular durante las crisis de 2008.
En bancarrota
La bancarrota supone una protección para la empresa. Es una manera de establecer de forma legal la necesidad de llegar a acuerdos con acreedores.
No soluciona los problemas de los usuarios.
Tampoco evita que las agencias gubernamentales investiguen a los ejecutivos y dueños de la empresa. Ya hay muchas organizaciones revisando lo ocurrido.