Satya Nadella, CEO de Microsoft, ha señalado en una de sus apariciones del foro económico de Davos que la privacidad de los datos debería ser considerada un derecho humano.
Nadella puso a la privacidad dentro de un conjunto de derechos relacionadas con el concepto de integridad de datos.
El ejecutivo también propuso al GDPR europeo como el modelo a seguir para alcanzar un estándar internacional. “En cierto sentido Europa ha tomado la delantera con el GDPR y ha regulado eficazmente”.
El Reglamento General de Protección de Datos entró en vigencia en 2016 y comenzó a aplicarse de forma efectiva, esto es luego de que los países comenzaran su regulación, a partir de 2018. Todas las empresas que operan en la Unión Europea deben ajustarse a su normativa.
Cierto consenso
Microsoft, Apple e IBM han señalado anteriormente que esperan que los Estados Unidos adopte las mismas medidas establecidas en la Unión Europea.
Por su parte, Sundar Pichai, CEO de Google, afirmó que es necesario tener una mayor regulación sobre la tecnología que amenaza la privacidad de los usuarios. Pichai comentó que la privacidad no podía ser un bien de lujo.
Efectos de las normas europeas
La normativa europea le ofrece a los ciudadanos un control más directo sobre lo que las empresas pueden hacer o no con sus datos.
La influencia de cada fallo también trasciende las fronteras del viejo continente y ya ha obligado a varias empresas a reconsiderar el diseño de sus productos y servicios. Sin embargo, por la naturaleza misma de la industria y la forma en que operan las empresas solo una legislación global podría asegurar plenamente los derechos de los usuarios.
Muchas empresas tienen como política simplemente ajustarse a las normativas locales. Lo que supone que los derechos que garantizan en un país no necesariamente los respetan en otro.