Si bien la expansión de Android como sistema operativo del mundo móvil es muy buena noticia para Google, parece no serlo tanto para la administración de China.
Un paper (lanzado el viernes pero conocido recién hoy) del Ministerio de Industria Tecnología de la Información llega a la conclusión de que la investigación y el desarrollo en sistemas operativos de China es “demasiado dependiente de Android”.
Aún reconociendo los orígenes “open source” del SO móvil, el gobierno chino se muestra preocupado acerca de que tanto las tecnologías principales como los posibles avances dentro de los marcos de esta plataforma “están fuertemente controlados por Google”, al tiempo que acusa a los de Mountain View de discriminar a las empresas chinas que intentan desarrollar sus propias alternativas de software denegándoles a las mismas el acceso al código fuente mediante acuerdos comerciales.
Este informe podría interpretarse como un llamado de atención hacia Google y a su vasta experiencia en acusaciones por conducta anticompetitiva, por las cuales se pueden enumerar conflictos con la FTC estadounidense o la Comisión Europea para la Competencia. Obviamente esta presentación del ministerio chino en si misma no significa un conflicto con Google, pero al menos servirá para que la firma comience a preocuparse por las acciones que toma en el que se ha convertido en uno de los mercados más importantes del mundo.
Por su parte, el informe destaca los intentos de compañías como Baidu, Alibaba o Huawei por generar un sistema operativo propio, esto quiere decir que si el gobierno chino elige apoyar a esas empresas podría tomar acciones concretas para detener el avance de Android en su territorio.
Según IDC, China sobrepasó durante 2012 a EEUU como el mayor mercado móvil del mundo, y durante el último trimestre de ese año, el 90% de los dispositivos móviles en China funcionaban con Android.