A menudo el mundo puede ser extraño y estar lleno de contradicciones. El director de la Comisión Nacional para el Desarrollo y la Reforma, Zheng Shanjie, se reunió con el CEO de Apple, Tim Cook. El funcionario señaló que esperaba que la compañía estadounidense mejorara la seguridad de los datos y la protección a la privacidad en sus productos.
Shanjie resaltó el apoyo que la comisión le brinda a las empresas extranjeras con negocios en China. También destacó la escala del mercado chino y el potencial que tienen los grandes grupos de medianos ingresos para las empresas multinacionales.
En el caso de Apple un 19% de sus ingresos, unos USD 394 mil millones, provienen de China.
Un pequeño precio a pagar
Apple, como tantas otras empresas, ha adoptado una política de ajuste a las leyes locales. Esto en China implica acceder a una gran cantidad de pedidos de censura. En la AppStore no puede mencionarse a Taiwan y no hay lugar para los VPN.
También resulta curioso que funcionarios chinos hablen de proteger la privacidad. China es una de las naciones con mayor infraestructura de vigilancia, incluyendo sistemas de puntaje social para castigar a quienes no se comporten como ciudadanos modelos.
En general, y esto también puede aplicarse a otros países como EEUU, lo que los gobiernos le piden a las empresas es que sus ciudadanos estén a salvo de los grupos extranjeros.
El caso chino es un poco más escandaloso, dado la naturaleza opresiva del régimen de gobierno.
