Estoy cansado del desprecio que tienen los twitteros por nosotros, los facebookeros. Nos acusan de frívolos, exhibicionistas, hacen predicciones apocalípticas sobre el fin de nuestra privacidad… Desde esta página les digo: twitteros, no les tenemos miedo, ¡fijemos aquí y ahora un encuentro para resolver nuestras diferencias al viejo estilo!