El nacimiento de Facebook vuelve a ser tratado en una corte estadounidense, ya que ex compañeros de Mark Zuckerberg de la Universidad de Harvard, que se adjudican la idea de la red social, pidieron la anulación del acuerdo por el cual recibieron 65 millones de dólares, porque consideran que son insuficientes.
Tal como se narra en la película “La Red Social”, los gemelos Tyler y Cameron Winklevoss, y su amigo Divy Narendra le pidieron a Zuckerberg que era su compañero en Harvard, que los ayudara a crear una red social para los estudiantes de la universidad en el año 2003.
Los hermanos afirman que Zuckerberg les robó la idea y retrasó el proyecto mientras trabajaba en su propio sitio, Facebook, que hoy tiene más de 500 millones de usuarios y un volumen de negocios anual estimado en 2.000 millones de dólares.
Aunque desde Facebook negaron estas acusaciones, en aquel momento, los Winklevoss y Narendra presentaron una demanda y aceptaron un acuerdo valorado en 65 millones de dólares en efectivo y en acciones.
Ahora, los tres intentaron convencer a una corte de apelaciones de que aquel acuerdo fue insuficiente porque en él se sobrestimó el valor que tenían entonces las acciones del sitio web.
De haberse valorado la acción en una cifra menor, ellos habrían recibido más títulos. Es decir, creen que deberían haber obtenido más dinero o más participación de la red social, informa la agencia de noticias AFP.
No obstante, los jueces reunidos en la corte de apelaciones de San Francisco parecían escépticos ante los argumentos de los demandantes e hicieron notar que estaban muy bien rodeados de expertos cuando aceptaron aquella compensación.
“Cuando uno es aconsejado por tanta gente, ¿no es difícil decir que fueron engañados?”, preguntó John Wallace, uno de los jueces del caso.
Tras la audiencia, Cameron Winklevoss sostuvo que están a la espera de una decisión. “Creo que está en manos del tribunal”, dijo.
Los jueces deberán tomar una decisión en tres meses. Si rechazan la apelación, los hermanos Winklevoss perderán el dinero en efectivo y los títulos, que están en depósito como garantía, pero serán libres de retomar su demanda original.