Esa fue la conclusión de un informe realizado por una consultora privada que también arrojo datos interesantes: el e-commerce en Argentina creció un 29,3% durante 2008 y de los 20 millones de usuarios, el 18% gasta más de 1000 pesos por año.
Hace 18 años que Prince & Cooke, consultora especializada en tecnología, realiza su “Informe de cuantificación del mercado Informático y de telecomunicaciones de Argentina”, y los datos relevados del año pasado no dejan de sorprender.
En base a la mencionada investigación, la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) salió a dar su palabra. Según este organismo el promedio de ahorro por compra es del 15% y no siempre el costo de envío a domicilio anula el ahorro: de acuerdo al análisis de perfil de usuarios de Prince & Cooke, “para aprovechar el ahorro, el 41% compra virtualmente pero luego retira el producto en los locales”.
¿Por qué comprar por Internet puede ser más barato? “Porque hace más eficiente el comercio: un importador puede vender directamente a un consumidor final y evitar los intermediarios que intervienen en la cadena comercial y encarecen el producto”, resaltó Juan Martín de la Serna, presidente de la CACE.
Según la encuesta de Prince & Cooke, los principales beneficios para quienes compran online son: comodidad (41%), ahorro de dinero (18%) y de tiempo (16,8%). “El Comercio electrónico creció un 29,3% en el 2008 conformando un mercado de $ 3750 millones”.
Los especialistas aseguran que la tendencia habría configurado un nuevo tipo de comprador: “El consumidor online es más exigente: tiene más poder, más información y tiene la posibilidad de comparar y de hacerse escuchar con sus críticas o recomendaciones a un clic de distancia, cosa que no sucede a través de canales tradicionales”, sostuvo Marcos Pueyrredón, director de Latinvia y miembro de CACE.
Y cuando se trata de ahorro, todo remite a la nueva crisis: “La coyuntura internacional y local en vez de estar provocando una contracción está provocando un efecto disparador y potenciador; los compradores encuentran precios más accesibles y muchos empiezan a publicar para convertir sus artículos en efectivo”, agregó el empresario.
Ustedes, queridos lectores, ¿siguen comprando tradicionalmente o pertenecen al nuevo consumidor electrónico? ¿qué experiencias pueden compartir al respecto? Esperamos sus comentarios.
Fuente: Clarín