La realidad virtual no ha logrado la popularidad que muchos esperaban y los relatos de ciencia ficción nos prometieron. Sin embargo, la tecnología ha avanzado notablemente y ha presentado nueva posibilidades técnicas y aplicaciones interesantes. Algunos de los aspectos más destacables están vinculados a la ampliación de los sentido involucrados en la experiencia.
Recientemente un grupo de investigadores, conformado mayormente por científicos de las universidades de Hong Kong y Tokio, ha desarrollado una solución para incorporar el sentido del gusto. Se trata de un chupetín (o paleta) electrónico.
Funcionamiento
El dispositivo tiene una serie de compartimientos en los que se alojan pequeña cantidades de gel de agarosa, una sustancia utilizada para almacenar los componentes. Con un poco de voltaje se activan los químicos en el gel forzando su salida a la superficie de la paleta. Cuando el gel se mezcla con la saliva del usuario se produce el sabor.
Para el usuario la experiencia debería ser similar a lamer un dulce. Pero a esto tenemos que agregar el entorno virtual, que puede brindar una imagen particular de lo que se está consumiendo.
Actualmente el diseño tiene unos 9 compartimentos. En ellos hay geles con sal, azúcar, ácido cítrico, te verde, leche, cereza, maracuyá, pomelo y durán. Con la combinación de estos ingredientes pueden obtenerse sabores más complejos. Aunque obviamente las opciones son limitadas.
Usos y perspectivas
Los desarrolladores han sugerido tres escenarios de uso para el chupetin de realidad virtual. En uno de ellos los doctores examinan el sentido del gusto de sus pacientes. En otro los niños pueden probar diferentes sabores como parte de un juego de realidad virtual. Y en un tercero los consumidores pueden probar productos antes de adquirirlos.
El objetivo del grupo es ampliar la cantidad de sabores así como el tiempo de funcionamiento del dispositivo, que actualmente equivale a una hora de degustación.