Una compañía de Internet que opera el servicio en la Ciudad de México, puso en funcionamiento una máquina que transforma el excremento de perro en minutos gratis de acceso a WiFi.
El objetivo de este proyecto es poder mantener más limpios los espacios públicos, ya que la prueba piloto se realizó en diez parques y plazas del Distrito Federal.
La máquina se llama Poo Wi-Fi y transforma las heces de los perros en minutos de acceso a WiFi gratuitos. La gente pone los desechos de sus perros en un contenedor especial que calcula el peso de las heces y el contenedor, que funciona como un modem, calcula los minutos de acceso gratuito a Wi-Fi equivalentes a los gramos de materia fecal recolectada.
Aunque la idea parece disparatada y asquerosa, fue confirmada por la empresa de publicidad, que se encargó de filmar un spot para mostrar el proyecto, que fue patrocinado por Terra.