Los robots son cada vez más sofisticados. Vienen en una multitud de formas y cumplen las más variadas funciones. En un extremo tenemos los humanoides con grandes habilidades motrices, similares a las de los seres humanos. En el otro los más pequeños, simples en su diseño pero extremadamente útiles. En particular en el campo de la medicina.
Los modelos utilizados para realizar intervenciones médicas son cada vez más asombrosos, pero tienen un pequeño problema. Luego de ser empleados deben ser removidos del cuerpo.
Investigadores de la Universidad de la ciudad de Hong Kong han probado una solución. Se trata de un robot creado con gelatina con propiedades magnéticas.
Beneficios del material
Gracias al magnetismo el dispositivo puede operarse de forma remota. La estructura del modelo incluye garras similares a las de un insecto que le permiten tomar y transportar cargas dentro del cuerpo humano. En los experimentos realizados se transportó una droga dentro de una estructura que imitaba el estómago.
La gelatina se disuelve en el agua, por lo que el robot puede eliminarse fácilmente en un par de días. Solo quedan en el cuerpo las partículas magnéticas.
Robots de gelatina
Ahora bien, el lector puede estar pensando “esto no es lo que me imagino cuando hablamos de robots”. Pero aún si consideramos a este desarrollo como una simple herramienta, sigue siendo un recurso admirable. Aunque nadie nos garantiza que en un futuro no nos crucemos con un robot de gelatina gigante.
