El gobierno chileno junto a la fundación MERI han puesto en funcionamiento la primer boya inteligente. Esta iniciativa es parte de la Blue Boat Initiative, un programa para la instalación de una red de boyas a lo largo de la costa oeste de Sudamérica. El objetivo es proteger a las ballenas a lo largo de su ruta migratoria.
Alertas tempranas
Las boyas utilizan hidrófonos y sensores oceanográficos para obtener información de sus alrededores. Los datos recolectados son transmitidos a través de satélites a las embarcaciones para que tomen las precauciones necesarias para evitar cualquier colisión con las ballenas. Adicionalmente, se espera recolectar información sobre la salud de los océanos y el calentamiento global.
Salven a las ballenas
El video que celebra la instalación de la boya comienza destacando la importancia de las ballenas para el medioambiente. En particular la absorción de dióxido de carbono. Luego advierte sobre la cantidad de animales que han muerto en los últimos años, aunque sin nombrar responsables. Como el lector se habrá dado cuenta, el principal factor es el tráfico marítimo.
La aplicación de tecnología para proteger a los animales es siempre una buena noticia. Quizás lo único extraño de la propuesta es que los seres humanos sigamos teniendo la necesidad de justificar la protección de una especie por los beneficios que brinda.