Un grupo de legisladores republicanos y demócratas ha presentado un proyecto de ley conocido como el Acta No Fakes. Si esta iniciativa se convierte en ley haría ilegal la recreación de la imagen o la voz de una persona sin su consentimiento. Aquellos afectados por alguna de estas producciones tendrían la posibilidad de buscar reparaciones por daños. Tanto las empresas como los individuos serían suceptibles a una demanda de reparaciones. Se consideraría como parte del delito tanto la producción como el hospedaje y la difusión no autorizada del material.
EL objetivo no son las imágenes de parodia, sino las recreaciones de nivel profesional. La idea es prevenir los casos en los que se usan los deep fakes para estafar a las personas, difamarlas difundiendo escenas y dichos falsos o simplemente para promover un producto sin su consentimiento.
Hace poco el mismo Elon Musk difundió un video falso de la ahora candidata a la presidencia de EEUU, Kamala Harris. El empresario no aclaró que se trataba de un Deep Fake.
El apoyo de SAG_AFTRA y OpenAI
Los legisladores entienden que todas las personas tienen el derecho a proteger su voz e imagen. Una importante cantidad de organizaciones en Estados Unidos han manifestado su apoyo a la propuesta. Entre ellas aparece SAG-AFTRA, el sindicato que actualmente se encuentra impulsando una medida de fuerza para evitar el uso no autorizado de la voz e imagen de los actores en la industria de los videojuegos. También en ese caso las IA generativas son el punto central de la discusión.
Algo más sorprendente es que OpenAI apoya la medida. Anna Makanju, vicepresidente de asunto globales, ha señalado: “Los creadores y los artistas deberían estar protegidos de la suplantación de identidad, y una legislación cuidadosamente pensada a nivel federal puede hacer la diferencia”.