No, no es una profecía maya, sino una predicción de los expertos del sector, para quienes en abril de 2012 se agotarán las direcciones IP a la que está ligada la expansión continua de la red y que todo dispositivo necesita para conectarse a la web y asegurarse que los datos lleguen al destino adecuado.
Según los especialistas, el 9 de septiembre de 2011 se entregará el último bloque de direcciones -unos 300 millones- a las empresas de internet para su uso y distribución.
Internet creció alrededor de la versión cuatro del esquema de direccionamiento del Protocolo de Internet (IPv4), que tiene espacio para cerca de 4.000 millones de estas direcciones.
Mientras que esta cantidad fue suficiente en la década de los setenta, cuando la red se estaba estableciendo, el rápido crecimiento de la World Wide Web fue agotando rápidamente estas reservas.
Así, el desarrollo de la web hizo que queden sólo el 7% de estas direcciones libres (unos 300 millones) por asignar, y para abril de 2012 se espera que todo el conjunto se agote.
Por otro lado, El sucesor de IPv4, el esquema de direccionamiento IPv6, tiene billones de direcciones disponibles, pero los países y las empresas no están adoptando el nuevo sistema con la rapidez que debieran para evitar el caos en la red.
Además, para evitar la llegada del problema se está limitando la entrega de nuevas direcciones IPv4. De acuerdo a Trefor Davies, director de tecnología de la empresa proveedora de servicios de internet (ISP) Timico, “no se pueden pedir más direcciones IP. Tienes que demostrar que las necesitas. Los registros no te permitirán tener más hasta que sus reservas alcanzan un determinado umbral”.
Si bien los protocolos IPv4 e IPv6 pueden existir uno a la par del otro, la evidencia sugiere que no es una unión libre de problemas, según Davies, y que el proceso de traducir una dirección al formato de otra produce un retraso significativo.
A menos que más ISP y otras empresas empiecen a usar direcciones IPv6, esas demoras podrían comenzar a afectar la navegación web en general, aseguró.
En este sentido, Simon McCalla, director de tecnologías de información de Nominet, que supervisa el dominio .uk. señaló que “la clave es centrarse en las posibilidades que el IPv6 trae a su negocio antes de que el IPv4 se agote“.