Un reciente reporte de la firma Nielsen Enterteiment apunta a que la música en formato digital está pasando del consumo por descarga al consumo por streaming. Esto podría suponer el paso de un modelo de negocio a otro, confirmado en muchos casos por las estrategias e inversiones de varias empresas. La opción de streaming por demanda ha crecido un 42% durante 2013 y se ha ubicado en unas 70 mil millones de reproducciones en la primera mitad de 2014. Al mismo tiempo las ventas de temas en formato digital han caído un 13% hasta llegar a unas 593 millones, en el caso de los álbumes la caída ha sido del 11,6% hasta unas 53,8 millones de ventas.
El reporte solo refleja la realidad en los Estados Unidos, pero una situación similar puede esperarse en gran parte del resto del mundo, con la salvedad que puede suponer cada marco legal y el acceso a las distintas ofertas. La tendencia se reafirma en las apuestas de muchas empresas como Apple, que ha adquirido recientemente a Beats para compensar la caída de ventas en iTunes.
Entre las empresas que brindan servicios de streaming relacionados con la música YouTube ocupa un lugar privilegiado y Spotify crece a gran velocidad. El streaming de videos ha aumentado un 35%, pero el de audio lo ha hecho un 50%. Actualmente ambas opciones aparecen en dimensiones similares, con los videos ubicándose en los 36,6 mil millones de reproducciones y el audio en 33,6 mil millones. Todo parece indicar que el streaming de audio superará al de video muy pronto, al menos en los Estados Unidos.
Las ventas de música digital en total, contando las opciones de streaming, han caído un 3,3%. Curiosamente la venta de discos de vinilo ha subido un 40% para un total de 4 millones de unidades.
Fuentes: Techcrunch