VIE, 21 / ENE / 2011
En febrero cierra Musimundo: ¿es el fin de las cadenas de discos en el país?
Hace tres meses que Red Megatone inició fuertes negociaciones para ejecutar una adquisición completa: absorbería a los empleados de Musimundo y el acuerdo podría cerrarse durante la primera quincena de febrero cuando se defina el monto de la operación.
“Más que nada, lo que se está discutiendo ahora es el precio. No hay contingencias laborales, ya que la casi totalidad de los empleados trabajan en los locales y Megatone tiene planes para absorberlos a todos”, dijo una de las fuentes al diario Clarín.
Musimundo, muy afectada en lo comercial por el auge de la música bajada por Internet, intentó en los últimos años compensar la caída de venta de CDs con artículos de audio, computación y librería. Tiene casi 50 locales y unos 1.000 empleados, de los cuales más de 900 trabajan dentro los locales.
La oferta por Musimundo fue hecha por dos de los socios de Red Megatone: Carsa, de la provincia de Chaco, y Electrónica Megatone, de la ciudad de Santa Fe. El tercer socio de Red Megatone es Bazar Avenida, con sede en Rafaela (Santa Fe), que pidió el concurso preventivo y no participa de esta negociación. La intención de Carsa y Megatone sería usar la red de Musimundo para poner un pie en Capital y competir con Garbarino y Frávega, los otros dos grandes retails del país.
La marca Musimundo pasaría así a la historia, con lo cual provocaría una seria crisis a los sellos que siguen apostando a vender música por la vía legal.
El fondo de inversión Pegasus es dueño de Musimundo. La compró en julio de 2003, a dos meses de haber asumido Néstor Kirchner, a un grupo de bancos que se la habían cobrado como deuda al Exxel Group. La cifra en efectivo no habría sido muy alta –se habló de US$ 15 millones– pero la deuda por entonces superaba los $ 100 millones, aun después de una importante quita concursal. Esa deuda ya estaría casi pagada. Las vueltas de los negocios: en 1998, el Exxel le había pagado US$ 235 millones a Natalio Garber, fundador de la empresa.
Durante esos 7 años, mientras Pegasus prosperaba con otros negocios que fue sumando –Freddo, Farmacity– el negocio de Musimundo se caía en todo el mundo. La cadena cedió varios locales: Santa Fe y Callao, Caballito, Lanús y Alto Palermo, entre otros. La superficie del enorme local del shopping Abasto fue reducida a menos de la mitad y el espacio vacante fue alquilado a la telefónica Claro. Un buen resumen de lo que hoy se vende y lo que no.
Fuente: Clarín
Hace tres meses que Red Megatone inició fuertes negociaciones para ejecutar una adquisición completa: absorbería a los empleados de Musimundo y el acuerdo podría cerrarse durante la primera quincena de febrero cuando se defina el monto de la operación.
“Más que nada, lo que se está discutiendo ahora es el precio. No hay contingencias laborales, ya que la casi totalidad de los empleados trabajan en los locales y Megatone tiene planes para absorberlos a todos”, dijo una de las fuentes al diario Clarín.
Musimundo, muy afectada en lo comercial por el auge de la música bajada por Internet, intentó en los últimos años compensar la caída de venta de CDs con artículos de audio, computación y librería. Tiene casi 50 locales y unos 1.000 empleados, de los cuales más de 900 trabajan dentro los locales.
La oferta por Musimundo fue hecha por dos de los socios de Red Megatone: Carsa, de la provincia de Chaco, y Electrónica Megatone, de la ciudad de Santa Fe. El tercer socio de Red Megatone es Bazar Avenida, con sede en Rafaela (Santa Fe), que pidió el concurso preventivo y no participa de esta negociación. La intención de Carsa y Megatone sería usar la red de Musimundo para poner un pie en Capital y competir con Garbarino y Frávega, los otros dos grandes retails del país.
La marca Musimundo pasaría así a la historia, con lo cual provocaría una seria crisis a los sellos que siguen apostando a vender música por la vía legal.
El fondo de inversión Pegasus es dueño de Musimundo. La compró en julio de 2003, a dos meses de haber asumido Néstor Kirchner, a un grupo de bancos que se la habían cobrado como deuda al Exxel Group. La cifra en efectivo no habría sido muy alta –se habló de US$ 15 millones– pero la deuda por entonces superaba los $ 100 millones, aun después de una importante quita concursal. Esa deuda ya estaría casi pagada. Las vueltas de los negocios: en 1998, el Exxel le había pagado US$ 235 millones a Natalio Garber, fundador de la empresa.
Durante esos 7 años, mientras Pegasus prosperaba con otros negocios que fue sumando –Freddo, Farmacity– el negocio de Musimundo se caía en todo el mundo. La cadena cedió varios locales: Santa Fe y Callao, Caballito, Lanús y Alto Palermo, entre otros. La superficie del enorme local del shopping Abasto fue reducida a menos de la mitad y el espacio vacante fue alquilado a la telefónica Claro. Un buen resumen de lo que hoy se vende y lo que no.
Fuente: Clarín