La Agencia Espacial Europea (ESA) ha informado que el Aeolus, un satélite de 1,3 toneladas, caerá en el planeta durante las próximas semanas. La organización quiere asegurarse de que el impacto se produzca en algún lugar deshabitado, sin embargo el satélite se está quedando sin combustible.
El dispositivo ha estado orbitando a unos 320 kilómetros de altura durante 5 años. Se ha ocupado de tomar datos atmosféricos tales como el viento. De esta manera ha ayudado a realizar predicciones del clima mucho más acertadas.
Maniobras finales
Actualmente Aeolus desciende 1 kilómetro por día. Lamentablemente por cuestiones del funcionamiento de la gravedad esto no nos da 320 días de espera. Además, la actividad solar está empujando al satélite.
La agencia tiene planeado una serie de maniobras un a vez que alcance los 280 kilómetros. Tras esta operación el staélite quedaría a unos 150 kilómetros.
Una vez en dicha posición un último cambo en la trayectoria debería hacer que el dispositivo quede listo para estrellarse en el océano. Lo cual no es tan difícil considerando que tres cuartas partes de planeta son océano.
Por lo general es muy poco probable que un satélite caiga sobre un lugar habitado del planeta. Pero el riesgo existe y lo responsables del dispositivo no pueden dejar la situación librada al azar.