En una reciente conferencia, Steve Jobs, CEO de Apple, dio explicaciones acerca de los ya conocidos problemas de cobertura del iPhone 4, y además de anunciar que la firma regalará fundas o les devolverá el dinero a los usuarios afectados, dijo que la industria compartía el problema de recepción de llamadas, dando específicamente los nombres de Samsung, Research in Motion, Nokia y la taiwanesa HTC.
Frente a esta afirmación, Samsung Electronics, Motorola y HTC Corp. salieron al paso de las acusaciones lanzadas por el CEO de Apple, Steve Jobs, y negaron las afirmaciones del máximo dirigente de la compañía de Cupertino en las que hacía extensivo el problema de cobertura de iPhone 4 a otras compañías.
Así, Hwan Kim, vicepresidente de comunicaciones móviles de Samsung, Sanjay Jha, copresidente ejecutivo de Motorola y Hui-Meng Cheng, director financiero de HTC respondieron a Jobs, a través de comunicados y declaraciones a la prensa.
En respuesta a los comentarios de Jobs, Samsung defendió sus diseños: “Basándonos en años de experiencia en diseño de teléfonos de alta calidad, los teléfonos móviles de Samsung emplean una antena interna que optimiza la calidad de la recepción para cualquier tipo de uso con el teléfono en la mano“, dijo Hwan Kim, vicepresidente de comunicaciones móviles, en un comunicado.
Por su parte, la taiwanesa HTC, declaró al diario ‘The Wall Street Journal’ que “efectivamente, los problemas no son comunes entre los ‘smartphones’. Según parece ellos [Apple] no dejaron a los operadores el tiempo necesario para probar el teléfono“.
En tanto, Sanjay Jha, CEO de Motorola expresó que “es peligroso sugerir que todo los teléfonos se desempeñan igual. En nuestras pruebas hemos encontrado que el Droid X se desempeña mucho mejor que el iPhone 4 cuando lo sostienen los consumidores entre las manos“.
De acuerdo a Therese Poletti de MarketWatch, “aunque se le aplauda a Apple haber afrontado el problema, el tono de su respuesta olía a arrogancia, con Jobs diciendo que los medios habían ‘exagerado’ el problema“.
“Como muchos analistas lo previeron, mientras la competencia se sintió ofendida, los consumidores terminaron con una fundita de plástico y una disculpa mal hecha. Pero conociendo la reverencia que muchas personas sienten por los productos de Apple, Jobs posiblemente piensa que con eso se callarán”, concluyó Poletti.