Phillip Paxson volvía de una fiesta de cumpleaños en la casa de un amigo en Hickory, en el estado de Carolina del Norte, Estados Unidos. Como no conocía el vecindario decidió utilizar Google Maps para guiarse. Era de noche y llovía. Siguiendo las indicaciones llegó hasta un puente. El vehículo cayó al río y Phillip se ahogó.
El conductor ignoraba que el puente había colapsado hace ya 9 años. Ahora la familia ha presentado una demanda contra Google dado que considera que su negligencia ha sido fundamental en el accidente.
Desconsideración, vandalismo y negligencia
Es casi imposible que un sistema de mapas tenga actualizados todos y cada uno de sus detalles. Sin embargo, la gente de Hickory había contactado a Google en varias ocasiones pidiendo que cambiaran el mapa para alertar de la caída del puente en 2013.
Las autoridades locales tienen sin dudas una gran cuota de responsabilidad por no haber reparado el puente. Hay que aclarar que, la entrada al mismo suele tener unas barreras que impiden el paso. Sin embargo, una serie de actos de vandalismo las habían eliminado.
Además de Google, la demanda se enfoca en las tres empresas que debían encargarse del mantenimiento del puente.
La muerte de Phillip fue desafortunada. La combinación de factores que llevó a su muerte es extensa. La negligencia de las empresas encargadas del mantenimiento, el vandalismo sobre las barreras, la oscuridad y la desconsideración de Google ante los reclamos locales.