MAR, 28 / DIC / 2010
Farmsphere llegó al Silicon Valley y te cuenta cómo lo hizo
Nuestros lectores más fieles seguramente recordarán a Farmsphere, “la red social de la comida” creada en la Argentina que servía para ver la trazabilidad de los alimentos que ingerimos. Y además, es uno de los emprendimientos ternados en los Premios RedUSERS. Bueno amigos, el proyecto voló y llegó a la Meca de las compañías IT: el Silicon Valley. Y Sebastián Nader, uno de los socios fundadores, volvió a charlar con RedUSERS para contarnos la experiencia.
“La idea de ir al Silicon Valley estuvo siempre, porque cuando estábamos en el Palermo Valley se notaba que había una energía especial. Es como ser relojero y querer ir a Suiza, así que empezamos a trabajar la tecnología acá para terminarla allá”, relata Sebastián.
Pero la magia ocurrió cuando se juntaron con un inversor que les preguntó: “¿tienen 30 mil dólares y la posibilidad de viajar?”. Entonces, juntaron el dinero para el pasaje, averiguaron cuál era el costo de vida (“1.500 dólares para arriba”, indica) y alquilaron un motel por tres días en San Francisco.
En esos tres días, la consigna fue simple: tratar de contactar a la mayor cantidad de gente posible y buscar un departamento. “Abrimos el Google Maps y empezamos a ver que la concentración de contactos se daba en San Francisco y Palo Alto. Terminamos en Mountain View porque era más barato, pero en el límite con Palo Alto”, recuerda Sebastián.
“Ni bien llegamos, charlamos con gente de la industria, conocimos a Wenceslao Casares (NdR: paradigma del emprendedor argentino, creador de Patagon.com) y nos pusimos a desarrollar fuerte la idea. Pero recibimos un montón de ayuda, porque la gente de California es muy abierta y si te ve apasionado por una idea, la gente te apoya y el financimiento es más fácil”, continúa.
Luego, llegó el momento de armar la empresa. “Salimos a la calle para hacer los estudios de comportamiento y a buscar el equipo: desarrolladores, marketing, etcétera. Toda las cuestiones administrativas y legales son empleados estadounidenses, los desarrolladores son de acá”, señala este joven emprendedor de 29 años.
¿Cómo es la vida en el Silicon Valley? “Es genial, ya la estoy extrañando”, asegura Sebastián, quien viajó a la Argentina para pasar las Fiestas con su familia en su querida ciudad de La Plata. “Fuimos súper-bien recibidos, estamos los tres en un departamento pero salimos los fines de semana a San Francisco, donde tenemos amigos. Todo está dispuesto para que uno se dedique a hacer lo que quiera hacer”, remarca.
También hay lugar para las anécdotas divertidas. Como coincidir en un bar con la actriz Liv Tyler. O comprarle un auto al director de la Singularity University, un reconocido centro de estudios para emprendedores de la Web. Sebastián agrega: “El día a día es caótico, dormís cuatro horas por día, pero no te aburrís un segundo”.
Aunque no todas son rosas. “La gente que te quiere te empieza a cuestionar, hay cosas emocionales en el medio, uno empieza a hacer egoísta en el buen sentido, de jugarse al 100% por la idea. Capaz que no hablo una semana con mi hermana y terminamos peleando”. Son los precios que hay que pagar por ser un argentino suelto en el Silicon Valley.
Farmsphere, hoy
El proyecto sigue siendo comandado por Sebastián y sus dos socios, Fernando Valdivia y Sebastián San Juan. Aunque tuvo algunas modificaciones, Farmsphere continúa con la idea original.
“Le cambiamos algunas cosas y tuvimos un problema muy grave con el equipo de desarrollo, que no contó con la capacidad para hacer todo a tiempo. Hicimos una idea más profunda, hallamos una profesional de diseño e interacción, e hicimos foco en la inteligencia de los alimentos”, revela Sebastián.
“De todas formas, la idea es la misma: la gente sabe qué es lo que le gusta y qué no, qué es sano y qué no lo es, ya sea porque lo estudió o porque alguien se lo dijo. Lo que hacemos es un servicio que con la colaboración de todos sea más inteligente y que pueda servir para tomar decisiones al comprar en el supermercado”, añade el emprendedor, fanático de Gimnasia y Esgrima de La Plata.
El próximo paso de Farmsphere es trabajar fuertemente un año solamente en California, porque los alimentos tienen un “componente regional muy fuerte”. Luego comenzarán a lanzarse versiones por ciudad y se espera que Buenos Aires esté lista para 2012.
Por Alejandro D’Agostino
Twitter: @lale_
Nuestros lectores más fieles seguramente recordarán a Farmsphere, “la red social de la comida” creada en la Argentina que servía para ver la trazabilidad de los alimentos que ingerimos. Y además, es uno de los emprendimientos ternados en los Premios RedUSERS. Bueno amigos, el proyecto voló y llegó a la Meca de las compañías IT: el Silicon Valley. Y Sebastián Nader, uno de los socios fundadores, volvió a charlar con RedUSERS para contarnos la experiencia.
“La idea de ir al Silicon Valley estuvo siempre, porque cuando estábamos en el Palermo Valley se notaba que había una energía especial. Es como ser relojero y querer ir a Suiza, así que empezamos a trabajar la tecnología acá para terminarla allá”, relata Sebastián.
Pero la magia ocurrió cuando se juntaron con un inversor que les preguntó: “¿tienen 30 mil dólares y la posibilidad de viajar?”. Entonces, juntaron el dinero para el pasaje, averiguaron cuál era el costo de vida (“1.500 dólares para arriba”, indica) y alquilaron un motel por tres días en San Francisco.
En esos tres días, la consigna fue simple: tratar de contactar a la mayor cantidad de gente posible y buscar un departamento. “Abrimos el Google Maps y empezamos a ver que la concentración de contactos se daba en San Francisco y Palo Alto. Terminamos en Mountain View porque era más barato, pero en el límite con Palo Alto”, recuerda Sebastián.
“Ni bien llegamos, charlamos con gente de la industria, conocimos a Wenceslao Casares (NdR: paradigma del emprendedor argentino, creador de Patagon.com) y nos pusimos a desarrollar fuerte la idea. Pero recibimos un montón de ayuda, porque la gente de California es muy abierta y si te ve apasionado por una idea, la gente te apoya y el financimiento es más fácil“, continúa.
Luego, llegó el momento de armar la empresa. “Salimos a la calle para hacer los estudios de comportamiento y a buscar el equipo: desarrolladores, marketing, etcétera. Toda las cuestiones administrativas y legales son empleados estadounidenses, los desarrolladores son de acá”, señala este joven emprendedor de 29 años.
¿Cómo es la vida en el Silicon Valley? “Es genial, ya la estoy extrañando“, asegura Sebastián, quien viajó a la Argentina para pasar las Fiestas con su familia en su querida ciudad de La Plata. “Fuimos súper-bien recibidos, estamos los tres en un departamento pero salimos los fines de semana a San Francisco, donde tenemos amigos. Todo está dispuesto para que uno se dedique a hacer lo que quiera hacer“, remarca.
También hay lugar para las anécdotas divertidas. Como coincidir en un bar con la actriz Liv Tyler. O comprarle un auto al director de la Singularity University, un reconocido centro de estudios para emprendedores de la Web. Sebastián agrega: “El día a día es caótico, dormís cuatro horas por día, pero no te aburrís un segundo“.
Aunque no todas son rosas. “La gente que te quiere te empieza a cuestionar, hay cosas emocionales en el medio, uno empieza a hacer egoísta en el buen sentido, de jugarse al 100% por la idea. Capaz que no hablo una semana con mi hermana y terminamos peleando”. Son los precios que hay que pagar por ser un argentino suelto en el Silicon Valley.
Farmsphere, hoy
El proyecto sigue siendo comandado por Sebastián y sus dos socios, Fernando Valdivia y Sebastián San Juan. Aunque tuvo algunas modificaciones, Farmsphere continúa con la idea original.
“Le cambiamos algunas cosas y tuvimos un problema muy grave con el equipo de desarrollo, que no contó con la capacidad para hacer todo a tiempo. Hicimos una idea más profunda, hallamos una profesional de diseño e interacción, e hicimos foco en la inteligencia de los alimentos“, revela Sebastián.
“De todas formas, la idea es la misma: la gente sabe qué es lo que le gusta y qué no, qué es sano y qué no lo es, ya sea porque lo estudió o porque alguien se lo dijo. Lo que hacemos es un servicio que con la colaboración de todos sea más inteligente y que pueda servir para tomar decisiones al comprar en el supermercado“, añade el emprendedor, fanático de Gimnasia y Esgrima de La Plata.
El próximo paso de Farmsphere es trabajar fuertemente un año solamente en California, porque los alimentos tienen un “componente regional muy fuerte”. Luego comenzarán a lanzarse versiones por ciudad y se espera que Buenos Aires esté lista para 2012.
Por Alejandro D’Agostino
Twitter: @lale_