El primer día de marzo, en la previa del MWC 2015, Samsung echó luz sobre el Galaxy S6, su nuevo teléfono insignia. En tiempos en los cuales la surcoreana ha visto el eclipse de su dominio (según Gartner, Apple es el nuevo mayor vendedor de smartphones a nivel global), y frente a un desempeño del S5 por debajo de las expectativas, en la presentación del S6 Samsung subrayó que este producto fue desarrollado desde cero y que en tanto no se trata de una evolución de su antecesor.
A poco de la aparición en escena de este nuevo flagship, DigiTimes señala que con el S6 Samsung espera superar el éxito del S4. Vale recordar que aquel equipo había vendido 16 millones de unidades en sus primeros tres meses de disponibilidad, 4 millones más que el S5 en ese mismo período. Las expectativas corren por cuenta de un ejecutivo de Samsung en Taiwán.
Con lanzamiento previsto para el 10 de abril, el Galaxy S6 llega con acabados metálicos, pantalla de 5.1 pulgadas SuperAMOLED con resolución 2K (2560 x 1440 píxeles), un procesador Exynos 7420 de 8 núcleos y tecnología de 64 bits a 2.1GHz, RAM de 3GB DDR4, versiones de 32, 64 y 128GB para almacenamiento interno, cámara de 16 megapíxeles y frontal de 5 megapíxeles, y batería de 2550mAh. Su sistema operativo: Android Lollipop.
Para superar el éxito del S4, el S6 deberá no solamente generar más atracción que el S5, también deberá ganar una dura batalla en un segmento que se ha renovado recientemente. Al respecto, en esta nota de RedUSERS repasamos las características del nuevo insignia de Samsung en relación a sus competidores, entre ellos el HTC One M9 y el iPhone 6.