A pesar de su longevidad, el correo electrónico sigue teniendo una importante presencia en materia comunicacional (a pesar de las redes sociales), con más del 60% de penetración entre el público de Internet.
Si bien a partir de la aparición de GMail se empezaron a romper las barreras casi insostenibles de casillas que alojaban un promedio de 20 MB totales de mails (hoy impensable) para superar los varios GigaBytes, queda una materia pendiente que son los archivos adjuntos. Actualmente es difícil superar los 20 MB y por eso de la popularidad de servicios como YouSendIt, que alojan los archivos a compartir en sus servidores y envían como mail un link para acceder a éstos.
Pero esto está a punto de cambiar, nuevamente de la mano de GMail. La cosa es que, como era de esperarse, el servicio Google Drive se integrará con GMail para usarlo como soporte para el adjunto de archivos que podrán alcanzar los 10 GB (según Google, 400 veces más de lo que permite un servicio de correo regular).
La ventaja de usar el alojamiento en la nube de Drive es que, si se efectúa una modificación en el archivo a posteriori del envío del mail, el destinatario descargará la versión actualizada. Para descargarlo el archivo deberá estar compartido con los destinatarios del mail, pero GMail revisará esta situación y advertirá al respecto para asegurarnos que todos tengan libre acceso.
Como es típico de Google, esta característica se irá habilitando de a poco en las cuentas de correo. Por ahora casi nadie dispone de esta posibilidad, pero en breve verán aparecer la opción Insertar archivos usando Drive al momento de redactar un correo.