El segundo trimestre de Google en 2013 ha supuesto ingresos por U$S 14.110 millones, con un ingreso neto de U$S 3.230 millones. Estos resultados han supuesto ganancias de U$S 9,56 por acción. El problema es que los analistas de Wall Street esperaban ingresos por U$S 14.500 millones y una ganancia por acción de U$S 10,78. Morgan Stanley se había animado a predecir ingresos un 20% superiores a los del mismo periodo en 2012, impulsados principalmente por YouTube.
En 2012 Google había conseguido U$S 12.210 millones, y U$S 10,12 por acción. Google ha crecido un 19% de un año a otro, pero los ingresos por acciones bajaron y el precio de las acciones cayó un 5%. La razón por la cual Google se ha quedado corto respecto a los resultados esperados sería la reducción en los precios de la publicidad en línea. Durante el segundo trimestre se experimentó una caída del 6%, el trimestre anterior la caída había sido del 4%. El mercado móvil, en particular, tiene valores un 40% más bajos de los que se encuentran en productos enfocados en computadoras de escritorio. El cambio en el mundo de la publicidad, el desplazamiento al mundo móvil, es un gran desafío. El problema tiene dos causas, por un lado las pantallas son más pequeñas y los anuncios aparecen como más invasivos y deben limitarse en cantidad. Pero además el impacto de los avisos en las ventas es mucho más difícil de rastrear. Google había pensado dar nueva vida a su sistema AdWords a través de Enhanced Campaigns. Sin embargo su impacto todavía no parece sentirse.
En lo que se refiere al hardware, Larry Page, CEO de Google, ha estado enfocado en dos dispositivos. El primero de ellos es el Google Glass. Los anteojos fueron señalados como un medio a través del cual la empresa espera generar un gran negocio. El otro ingenio es el Moto X, de la división Motorola. Page espera que este teléfono produzca un gran impacto en el mercado.