La Universidad Central de Florida emprendió un estudio que involucró a cuarenta participantes quienes, a bordo de un simulador de conducción, se enfrentaron a diversos escenarios viales llevando puestas las Google Glass o empleando un smartphone, en ambos casos para enviar mensajes de texto. Vale recordar que con las gafas de Google aquella acción se ejecuta mediante el dictado por voz.
El estudio arroja dos conclusiones principales. Por un lado, se indica que utilizar Google Glass para enviar mensajes durante la conducción resulta tan perjudicial y provoca tanta distracción como hacerlo con el smartphone. En tanto, durante un accidente no se evidenciaron diferencias en la reacción de ambos grupos. Por otra parte, el estudio revela que en relación a los conductores que envían mensajes con el móvil, los usuarios de Google Glass reaccionan más rápidamente tras el incidente, retomando el control del vehículo.
En esta línea, tal como rescata Phone Arena, un estudio de la Asociación Automovilística Estadounidense (AAA) había señalado que los comandos verbales son tan peligrosos como el texting durante la conducción.
Otra de los descubrimientos del estudio que nos convoca en este repaso: los conductores que llevan puestas las gafas inteligentes de Google tienden a acortar la distancia respecto al vehículo que tienen delante, lo que sugiere que el uso de aquel dispositivo causaría cierta pérdida de control.
Según señala ArsTechnica, aquel mismo departamento de investigación de Florida había emprendido anteriormente un estudio que determinó que los niveles de distracción que generan el texting al volante son idénticos en participantes que utilizan un teléfono propio o un dispositivo al que no están familiarizados.
En enero del año en curso se divulgó un caso ocurrido en San Diego, Estados Unidos, que tuvo como protagonista a la uruguaya Cecilia Abadie. Además de ser una de las participantes del programa de exploradores de Google Glass, esta mujer se convirtió en la primera persona en ser multada por conducir su automóvil llevando puestas las gafas inteligentes. No obstante, Abadie fue más tarde absuelta por un tribunal. Engadget había explicado que si bien Abadie llevaba las gafas puestas, las mismas no estaban encendidas.
Mientras tanto, se ha divulgado el lanzamiento de una campaña de concientización que procura “pausar” las conversaciones mientras manejamos. Más detalles al respecto pueden ser consultados en esta nota de RedUSERS.
Imagen: Slash Gear