Hace un par de días Google lanzaba su primera laptop de alta gama, la Chromebook Pixel, un equipo exclusivo de la firma que cuesta unos módicos 1.299 dólares y porta el reconocido Chrome OS como sistema operativo.
Pero los anuncios para el buscador no se detuvieron allí: solamente horas después Google lanzó parches de software para el kernel de Linux, los cuales permitirían el uso de alguna de las distribuciones de este sistema operativo en la Pixel.
Estos parches reconocen el hardware y se integran como soporte de comunicación entre el Linux y los componentes del equipo, posibilitando que la pantalla táctil, el sensor de luz o el trackpad puedan integrarse directamente al kernel de Linux.
Asimismo, vale aclarar que no se podrá utilizar en seguida cualquiera de las innumerables distros que tiene Linux en la nueva Chromebook, aunque si es cierto que estos parches abren la posibilidad a los desarrolladores de Linux para que puedan otorgar soporte para estos muchos SO.
Por otra parte, la realidad es que para un hardware tan potente como el que tiene la Pixel, probablemente Chrome OS parezca insuficiente para algunos usuarios, que tal vez juzguen mejor adquirir otro equipo: la posibilidad de cambiar el SO permitiría a los consumidores “sacarle el jugo” a una laptop de las características de la nueva Chromebook.
Por último, la decisión habla muy bien de Google, que otorga cierta libertad a los usuarios para que decidan cómo usarán y explotarán los recursos del hard adquirido, un ejemplo para empresas que ofrecen productos de software mayormente restrictivos, como Microsoft o Apple.
La Chromebook Pixel cuenta con un microprocesador Intel Core i5, 4GB de RAM y una pantalla táctil de 12,85″ con una densidad de píxeles de 239 PPI, y se vende a un precio inicial de 1.299 dólares, el cual puede escalar hasta los 1499 si se solicita la versión con 64Gb de almacenaje y conectividad LTE.
Vía: FayerWayer, Phoronix