Google ha aumentado la recompensa máxima para quienes descubran bugs en sus smartphones de USD 200 mil a USD 1,5 millones.
El premio mayor es para quienes encuentren defectos en el chip de seguridad Titan M, que se encuentra en los modelos de la línea Pixel. Este ingenio tiene como objetivo proteger el sistema operativo y almacenar los datos biométricos del usuario.
Google ha señalado que desde 2015 ha pagado más de USD 4 millones por reportes de problemas de seguridad.
Objetivo
El objetivo de las recompensas es estimular a los profesionales ha enfocarse en investigar posibles problemas en los dispositivos de la compañía. De esta manera se expande notablemente la posibilidad de que estos defectos sean detectados y reportados antes de que se conviertan en un gran problema.
Sobre la línea Pixel hablamos hace poco cuando les contamos sobre un defecto causado por el software de las cámaras de fotos.
Google no es la única empresa en ofrecer recompensas, Facebook, Samsung y Apple también implementan estos incentivos.
La competencia
Sin embargo, lo interesante del incremento de la recompensa es que refleja otro aspecto del universo de la seguridad informática, la competencia de los mercados negros. Básicamente, el premio es mayor porque Google espera que les informen los problemas a sus expertos antes que se los vendan a los criminales.
Katie Moussouris, jefa de seguridad de Luta Security, explica al respecto: “De la misma manera que ocurrió cuando Apple subió sus recompensas a USD 1 millón, la medida de Google no podrá competir con el mercado negro que puede subir los precios en cualquier momento”.
Moussouris cree que el incremento de las recompensas también supone preguntas sobre la capacidad que tienen las tecnológicas para conseguir y retener a los mejores profesionales en el área de la seguridad.