Este viernes, el Grupo Renault ha presentado el plan “Drive the Future” que proyecta el lanzamiento de ocho modelos totalmente eléctricos y 12 híbridos para 2022. Simultáneamente, reducirá su gama de unidades diésel a la mitad durante el mismo período.
Mucho tuvo que ver en esta decisión su condición de firma francesa. La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, que se opone a los combustibles fósiles y al uso innecesario de automóviles, quiere deshacerse de todos los vehículos diésel del núcleo urbano de su ciudad para 2025. Francia, en su conjunto, espera prohibir las ventas de automóviles fósiles en 2040.
Se trata, sin dudas, de un gran cambio para una empresa que fue estandarte de los motores diesel durante años. Sin ir más lejos, en un momento este tipo de vehículos representó el 60 por ciento de sus ventas.
Si bien no significa un cambio tan drástico como el de Volvo, que pretende pasar a unidades eléctricas e híbridas para 2019, se trata de otro movimiento más en la industria camino a la masificación de los sistemas de propulsión alternativos. Al igual que VW y otros grandes fabricantes, Renault-Nissan es consciente de que los autos eléctricos tendrán un papel mucho más importante en el mercado de los próximos años.
Vía: Liberation