Hay quienes son felices al ponerse un traje y descubrir que habían olvidado unos billetes en algún bolsillo, Kristoffer Koch se olvidó que había comprado bitcoins. Koch invirtió unos USD 26,60 en 2009 mientras escribía una tesis sobre encriptación. Luego no le prestó mayor atención a la moneda virtual hasta que en 2013 la notoriedad que adquirieron los bitcoins lo llevó a revisar los resultados de su inversión. Koch tenía un total de 5 mil bitcoins, una cantidad que actualmente se traduce en unos US$ 886 mil.
Los bitcoins se guardan en billeteras virtuales encriptadas aseguradas a través de una clave privada. Desafortunadamente Koch había olvidado la clave, y solo cuando logró recordarla pudo revisar cual era su fortuna. Aunque la tendencia general es al alza, el bitcoin es todavía una moneda muy inestable, solo basta recordar que en abril el valor ascendió hasta los US$ 266 y luego cayó a unos 50 dólares.
También está extremadamente ligada al uso que hacen de ellas ciertos negocios. Un claro ejemplo fue lo sucedido con la caída del sitio de venta de artículos ilegales Silk Road. Se calcula que el sitio había producido intercambios por un valor de US$ 1.200 millones en bitcoins. Cuando el sitio fue cerrado por el FBI el precio de la moneda paso de 145 a 113 dólares. Sin embargo, con el tiempo logró trepar hasta los 197 dólares. Actualmente, según el sitio de intercambio Mt. Gox su precio se ubica en los US$ 214.
Koch ya ha hecho efectivo un quinto de su fortuna virtual para comprarse un departamento en Toyen, una de las áreas de alto nivel en Oslo, Noruega. Los bitcoins están ganando cada vez más notoriedad y despertando un mayor interés. Incluso es posible utilizarlos como moneda de forma directa en algunos pubs británicos. En octubre, el primer cajero automático de bitcoins fue instalado en Vancouver, Canadá. También han llamado la atención de varios gobiernos que se han planteado cobrar impuestos sobre las operaciones realizadas con esta moneda.
Fuentes: Theguardian, IBTimes
