Instagram ha decidido que todas las cuentas de usuarios menores de 16 años queden clasificadas como privadas por defecto. Esto supone que el contenido que aparece en ellas solo puede ser visto por seguidores aprobados.
En pruebas hechas antes de establecer esta medida la empresa descubrió que solo 1 de cada 5 usuarios establecía el modo público cuando su cuenta estaba en modo privado.
Los usuarios que se encuentren en el ya mencionado segmento etario recibirán una notificación apuntando los beneficios del modo privado.
Anteriormente al crear una cuenta los usuarios debían elegir entre el modo público y el privado.
Experiencia a medida e inteligencia artificial
Instagram mantiene sus planes para crear nuevas aplicaciones dedicadas a los menores de 13 años. Una iniciativa que ha sido criticada fuertemente.
Facebook argumenta que la realidad es que esos usuarios existen y no hay una manera totalmente efectiva de evitar que las personas finjan tener una edad que no tienen. Por lo tanto la mejor solución, según la empresa, es diseñar una experiencia a medida que pueda ser regulada por padres y tutores.
La imposibilidad de establecer un límite etario efectivo ha sido siempre un límite a lo que las empresas pueden hacer. En paralelo al desarrollo de nuevas aplicaciones, Instagram trabaja en el desarrollo de una inteligencia artificial para detectar las cuentas de menores.
Por otro lado la publicidad destinada a los menores comenzará a clasificarse según edad, genero y ubicación, en vez de en los hábitos de navegación detectados.