Para fines de marzo de 2028 Japón espera haber cubierto con redes de fibra óptica al 99,9% de los hogares. Aunque el país es famoso por el desarrollo y aplicación de la tecnología, como cualquier otra nación del planeta, tiene espacios donde algunas comodidades no han llegado aún. De hecho muchos consideran que la transformación digital de Japón sufre un importante retraso. Actualmente solo el 58% de los hogares japoneses cuentan con acceso a redes de fibra óptica. Este nivel puede ser muy bueno si lo comparamos con la realidad de otras naciones, pero no tanto considerando el lugar en el que quiere estar Japón.
El actual primer ministro de la nación, Fumio Kishida, ha presentado un plan para que regiones rurales y suburbanas alcancen el mismo nivel de acceso a los servicios digitales que las grandes ciudades.
Objetivos claves
Entre los objetivos de la iniciativa se encuentran:
Lograr que la nueva generación de redes 5G cubra el 99% del país para fines del año fiscal 2030.
Rodear Japón de los cables submarinos de transmisión de datos para 2025.
Aumentar la cantidad de personas con formación en digitalización de 2,3 millones a 3,3 millones para fin del periodo fiscal de 2026.
Resultados esperados
Todas las metas señaladas debería, si todo sale bien, tener un impacto positivo sobre la economía del país. También se espera que ayuden a resolver algunos problemas.
El gobierno cree que la digitalización podría ayudar a paliar los problemas de envejecimiento y caída poblacional en las regiones rurales. También espera que cree empleo y promueva las economías regionales. Otro beneficio que podría darse es el movimiento de una parte de la población ahora asentada en las grandes ciudades a zonas menos densamente pobladas.