En el marco de un importante procedimiento, la AFIP efectuó allanamientos simultáneos en Córdoba y Ezeiza para desbaratar una operación de contrabando de productos electrónicos por un valor de más de 450 millones de pesos.
En total se secuestraron 540 mil teléfonos celulares falsificados, además de baterías, cámaras digitales, reproductores MP3 y MP4, entre otros elementos, que tenían como destino algunas ciudades del interior argentino así como también Paraguay y Brasil, tal como lo informó la propia AFIP en un comunicado oficial.
Durante el proceso de investigación se comprobó que la red de contrabandistas utilizaba rutas terrestres y aéreas provenientes de Hong Kong, haciendo escalas en Australia y Europa para luego concentrar los cargamentos de productos falsificados en Ezeiza. Desde allí, por medio de avionetas, pretendían transportar la mercadería ilegal hacia Ciudad del Este (Paraguay) y otras localidades de nuestro país.
Además de la impresionante cantidad de teléfonos celulares secuestrados, lo que más llamó la atención de las autoridades fue la increíble similitud de los teléfonos falsificados en relación a sus contrapartes originales, por lo que se debió recurrir a la colaboración de representantes argentinos de las marcas involucradas para identificar su imitación.
Por los montos económicos involucrados y las cantidades retenidas, “se trata del mayor procedimiento contra el fraude marcario y sus delitos conexos realizado por la AFIP desde 2010.”