La Comisión para la Protección de Datos de Irlanda ha señalado que en el caso de las IA es importante no tomar decisiones apuradas. Este pronunciamiento es especialmente importante dado que es en este país donde el organismo tiene su sede central. Mucho de lo que se decide allí tiene fuerte repercusión en el resto del continente.
Helen Dixon, la directora de la organización, explicó que los esfuerzos están orientados en entender un poco más como funciona la tecnología, los modelos de lenguajes y como se generan los datos de entrenamiento. “Creo que estamos en una etapa temprana, pero es tiempo de tener estas conversaciones antes que apurarse con prohibiciones que no pueden sostenerse”.
El caso italiano
Lo señalado parece una alusión a lo ocurrido en Italia, donde el gobierno decidió prohibir el uso de ChatGPT luego de que datos de sus suscriptores se filtraron a través del bot. Los reguladores italianos señalaron que la medida era temporal, y el objetivo era sentarse con la empresa a conversar los posibles y necesarios cambios.
Por el momento parece que OpenAI ha optado por ignorar Italia y seguir operando en otros países.
El estudio de las IA
La DPC ha creado hace unos días un grupo especial para el estudio de las IA como ChatGPT. La meta en este caso es aportar a la discusión sobre el uso de la tecnología, dado que la entidad reconoce que existen otros aspectos claves a considerar, como el derecho de copia y los casos de difamación, que está fuera de su área de trabajo.
