Un reciente artículo publicado en el reconocido diario francés Le Monde, señaló que la NSA había recopilado datos sobre más de 70 millones de llamadas telefónicas en Francia. Los registros habían sido obtenidos entre diciembre de 2012 y enero de 2013. Además, el sistema de vigilancia de la NSA capturaba datos de los SMS en base a una serie de palabras clave. Sin embargo no se sabe si se guardaba el contenido o cuál es el número exacto de mensajes interceptados. El informe se basa en filtraciones provistas por el ex analista de inteligencia Edward Snowden.
Las revelaciones no han pasado sin armar su cuota de escándalo en el país europeo. El embajador estadounidense, Charles Rovkin, fue convocado para responder a estos señalamientos. El presidente de Francia, Francois Hollande (en la imagen), ha expresado al respecto su profunda desaprobación sobre las acciones de la NSA, señalando que vulneran la privacidad de los ciudadanos de dicho país.
También le ha pedido al presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, una explicación al respecto. Algunos periodistas han señalado que parte de la indignación del gobierno francés es más que nada una demostración para sus ciudadanos. Es una reacción necesaria luego de que las autoridades de ese país fueran acusadas de tener sus propios programas de espionaje sobre sus ciudadanos.
La Casa Blanca ha señalado que los presidentes han discutido el tema, que contiene algunos aspectos sobre los que los países amigos y aliados pueden tener inquietudes legítimas. Además, se afirmó que Obama está revisando el modo en que se realizan las actividades de inteligencia para balancear las necesidades legítimas de seguridad con las preocupaciones sobre la privacidad.
El Secretario de Estado de los Estados Unidos, John Kerry, comentó al respecto del incidente que Francia era uno de los aliados más antiguos del país y las conversaciones bilaterales continuarían hasta resolver el problema. “Proteger la seguridad de nuestros ciudadanos en el mundo actual es muy complicado, una tarea desafiante”, dijo, y argumentó que : “hay mucha gente allá afuera que intenta hacer daño a otra gente”.
Por su parte, James Clapper, Director de Inteligencia Nacional de los Estados Unidos, ha negado las acusaciones. El funcionario ha utilizado el servicio de blogs Tumblr para señalar que lo expresado en el diario Le Monde es inexacto y tendencioso. “El señalamiento de que la Agencia de seguridad Nacional ha recopilado más de 70 millones de datos de llamadas de ciudadanos franceses es falso”, afirmó.
Este es otro golpe para las relaciones internacionales de los Estados Unidos, después de que el diario alemán Der Spiegel revelara que la NSA espiaba sistemáticamente al gobierno mexicano.