Gran Bretaña sufrió hace dos meses los disturbios más violentos en casi 30 años. Miles de jóvenes salieron a las calles organizados en convocatorias realizadas vía redes sociales y el servicio de mensajería de Blackberry. Este hecho alertó a los organismos de control del gobierno, quienes no habían previsto éste tipo de comunicaciones como potenciales focos de rebelión.
La policía de Londres por órdenes de su gobierno debió realizar medidas abusivas para investigar el origen y a los organizadores de los incidentes que destruyeron zonas distintas ciudades.
El diario The Guardian recibió cierta información a partir de investigaciones periodísticas en las que se indica que la policía londinense se habría equipado con aparatos de rastreo e intrusión a celulares en la empresa Datong. Estos mismos tienen entre sus clientes a la Secretaría de Defensa de los Estados Unidos y muchos gobiernos autoritarios de medio oriente.
Este sistema de rastreo e intrusión de teléfonos celulares recibe el nombre de “Listed X”, tiene el tamaño de un portafolio y un alcance de 10 kilómetros. Además el dispositivo funciona a la perfección en movimiento y puede operar de manera inalámbrica y de esta manera, obtener códigos IMSI e IMEI de los teléfonos dentro de ese radio.
Otras características del dispositivo es que puede rastrear un determinado IMEI y hasta incluso puede obtener SMS, chats y hasta incluso puede desviar la llamada de una línea entrante hacia donde lo desee.
Luego de los intentos fallidos del gobierno británico para impulsar una ley que de poder de apagar las redes sociales en los momentos en los que se está produciendo una manifestación, la población recibe este tipo de noticia.
Por obvias razones las organizaciones de derechos civiles y muchos funcionarios ingleses creen que estas herramientas sobrepasan la violación de la privacidad de los ciudadanos.
Fuente: Fayerwayer.com y Guardian.co.uk
