Definitivamente Samsung y Apple son los grandes protagonistas de esta “batalla móvil” generada a partir de la permanente innovación (en mayor o menor escala, dependiendo de la época) que afecta a los smartphones.
Si bien hay un condimento interesante que es la pelea por las patentes (que llegó a un punto que hartó al propio Steve Wozniak), también tiene una pata muy fuerte en los equipos que ambas compañías lanzan al mercado y que las ubican como claras referentes.
La semana pasada tuvo a Apple como protagonista con el lanzamiento de iPhone 5, gracias al excelente posicionamiento que consiguió la empresa con el correr de los años. El sólo anuncio de la Keynote donde se hizo la presentación generó una de las mayores expectativas del año en el mundillo informático, y el lanzamiento una catarata de noticias en medios de todo tipo. Se podría decir que ni siquiera necesitaron pautar publicidad. Sólo un evento les bastó para tener a medio mundo hablando de ellos. Tampoco hicieron mella las críticas que recibió el producto por parte del periodismo: el iPhone 5 batió récords agotando la preventa en apenas 60 minutos.
En la vereda de enfrente está Samsung, que con su línea Galaxy enarbola la insignia de los fanáticos de Android y/o los anti-Apple. Pero Samsung no es sólo la representación de una ideología: la empresa ha conseguido producir equipos que le “sacan el jugo” como pocos al sistema operativo de Google, con un hardware que roza la exquisitez. El Galaxy SIII es el más claro ejemplo de esto, pero no se quedan sólo con esto.
Apenas presentado el iPhone aparecieron en la web publicidades (¿oficiales?) que comparan al iPhone 5 con el Galaxy SIII marcando la superioridad de este último. Y en apenas semanas presentarán oficialmente al Samsung Galaxy Note 2, su “smartphone casi tablet” con el que esperan conseguir una venta de 20 millones de unidades.
A esto se suma la ola de rumores (que se imaginarán de dónde se desprenden) refiriendo a que en la Mobile World Congress 2013 (a realizarse en frebrero/marzo) hará su aparición el Galaxy SIV, con pantalla OLED de 5 pulgadas, carcasa más delgada y liviana y chip Quadcore (Exynos o Qualcomm) con compatibilidad LTE. En resumen, la idea es no darle la más mínima ventaja a Apple, que actualmente controla el 34% del mercado estadounidense (Samsung tiene el 24%).
¿Y quieren más? En diciembre el juez federal norteamericano Lucy Koh celebrará una audiencia para recibir y considerar la solicitud de Apple (posterior a ganar el juicio por las patentes) para que se prohíba permanentemente la venta en EE.UU. de ocho modelos de smartphones y tablets de Samsung, de los cuales siete pertenecen a la serie Galaxy.
Fuentes: Engadget.com, TheNextWeb.com