Al enterarnos que Land Rover presentó Explore, en primera instancia suponemos que se trata de un nuevo todoterreno del fabricante inglés. Sin embargo, para sorpresa de muchos no se trata de un coche sino de un teléfono. Aunque para ser certeros hay que decir que se trata de un desarrollo a cargo de Bullit, una compañía británica que ha sido la responsable de la fabricación de otros smartphones que llevaron marcas célebres (y poco relacionadas al negocio móvil) como Kodak o Carterpillar. ¿Recuerdan el Kodak Ektra? Pues aquel equipo fue creado por la mencionada Bullit.
El Land Rover Explore, que no casualmente es anunciado a pocas horas de la apertura del MWC 2018, es un smartphone que procura emular señas distintivas de la automotriz. Comenzando por su evidente robustez, siguiendo por la presencia de un diseño en la cara frontal que recuerda la parrilla delantera de la línea de vehículos Land Rover.
Este teléfono es un gama media-alta. Se potencia con un procesador MediaTek Helio X27 de 10 núcleos y tiene 4GB de RAM, con 64GB nativos. Uno de sus puntos destacados es la capacidad de la batería, que es de 4,000mAh. Aunque en este punto hay que mencionar un aspecto relevante: el Land Rover Explore incluye características modulares inspiradas en los Moto Mod de Motorola-Lenovo (Engadget dixit), y uno de estos accesorios permite añadir 3,600mAh extra alcanzando una impresionante autonomía.
Otra característica que podemos esperar en un smartphone robusto: llega con certificación IP68, volviéndolo resistente al polvillo, la suciedad y a las caídas (hasta 1.8 metros en las pruebas).
El Land Rover Explore fabricado por Bullit llegará al mercado hacia el mes de abril a un precio aproximado a los US$800. Al añadir accesorios modulares o packs ofrecidos para el mismo (como uno que está pensado para ciclistas) habrá que añadir algunos dólares extra, en el rango de los US$70 a US$100.
Por Uriel Bederman