Un informe elaborado por la firma de análisis Flurry indica que, en el mercado móvil, las aplicaciones pagas pierden cada vez terreno en favor de los contenidos ofrecidos de manera gratuita.
Los números indican que el número de Apps gratuitas en iOS pasó del 84 por ciento en 2012 al 90 por ciento en 2013. Esto no significa necesariamente que los ingresos para los desarrolladores hayan disminuido, ya que en la mayoría de los casos las aplicaciones cuentan con anuncios, compras in-app o versiones Premium (pagas), que permiten el acceso a más funciones o la posibilidad de correr el soft sin ningún tipo de publicidad (estas versiones generalmente oscilan entre los 0.99 y 1.99 dólares).
Asimismo, el relevamiento aseguró que son muy pocos los usuarios móviles que están dispuestos a pagar por este tipo de experiencia Premium. “La gente prefiere el contenido libre por sobre la posibilidad de pagar para evitar anuncios o tener una experiencia de mucha mayor calidad”, destacó Mary Ellen Gordon, Directora de Estudios y Análisis de la Industria de Flurry.
Por otro lado, también se estudiaron los precios de Android e iOS. El resultado, acorde al pensamiento general que indica que en la plataforma de Google los usuarios están menos interesados en pagar por un programa, arrojó los siguientes números: En Android el precio medio de las Apps en 2013 es de 0,06 dólares, mientras que en iPhone es de 0,19 dólares y en iPad llega a 0,50 dólares. Para Flurry, los valores más elevados en la tableta de Apple obedecen al perfil de sus usuarios, que ostentan mayores ingresos, aunque también puede estar relacionado con la tendencia inicial del producto de cobrar más caros sus contenidos por incorporar una pantalla de mayor tamaño.
Flurry concluye su informe explicando que el consumo de Apps móviles se parece cada vez más al de la TV, la radio e internet, ya que los usuarios pueden no estar a gusto con los anuncios, pero están dispuestos a tolerarlos a cambio de acceder a contenido libro. Al mismo tiempo, este tipo de desarrollos tiene un potencial para ingresos que no existe en otros soportes: las compras in-app. Esto puede lucrativo sobre todo para aquellos títulos que gozan de gran popularidad, como el Candy Crush, que en julio habría obtenido ganancias de 633.000 dólares diarios por medio de esta modalidad.
La contracara de este modelo de negocio es la dificultad que tienen los pequeños desarrolladores para llevar sus propuestas a las altas esferas de las tiendas online. Datos divulgados por Distimo a principios de 2013 aseguran que sólo el 2 por ciento de los principales “publishers” de contenidos de iPhone son pequeñas compañías, mientras que en Android ese número es del 3 por ciento. Antes de convertir a sus usuarios en abonados a través de las compras in-app, los desarrolladores deben lograr que sus contenidos sean descargados, algo que está resultando más difícil que nunca.
Fuente: TechCrunch.com
Foto: Reuters.com