La compañía japonesa ispace se había propuesto aterrizar una nave en la Luna. Durante un buen tiempo todo salió como era de esperar, pero cuando llegó el momento de realizar el descenso los operadores perdieron contacto con la unidad. Unas seis horas después confirmaron lo que ya era un más que poderoso rumor, la nave se había estrellado.
“Ha sido determinado que existe una alta probabilidad de que el modulo de descenso eventualmente haya tenido un aterrizaje forzado en la superficie lunar”, fue el comunicado de la empresa.
De esta manera terminó la misión, que había exigido más de 4 meses de dedicación, sin contar preparativos previos. Japón estuvo al borde de unirse al pequeño club de naciones que han aterrizado con éxito en la Luna (Rusia, China y Estados Unidos). Desconocemos cuantos países han estrellado dispositivos en nuestro satélite.
Robots perdidos
El modulo japonés, conocido como Hakuto, llevaba consigo un pequeño explorador de los Emiratos Árabes Unidos y un robot japonés con forma de esfera. La misión de estos dispositivos iba a ser breve, se habían calculado apenas unos 10 días de funcionamiento.
Estuvimos a punto de tener un transformer en la Luna. No pudo ser.
Error de cálculo
Hakuto había entrado en órbita lunar el 21 de marzo. El descenso había comenzado bien, sin embargo los tanques de los propulsores que debían amortiguar la caída se vaciaron rápidamente. El módulo tomó velocidad y luego no se supo más de él. Al parecer el dispositivo habría cometido un error de cálculo.