Luego de meses de rumores, HMD Global presentó el esperado Nokia 8, el teléfono con el que la marca finlandesa quiere volver a pisar fuerte en el mercado de telefonía móvil. No hubo grandes sorpresas en su anuncio, ya que prácticamente coincide con todas las filtraciones publicadas por la prensa especializada.
El dispositivo está equipado con un procesador Qualcomm Snapdragon 835, el estándar para los teléfonos de gama alta de 2017; 4GB de RAM, 64GB de almacenamiento interno (suma una variante de 128GB de almacenamiento), y batería 3090mAh con tecnología Qualcomm QuickCharge 3.0.
Respecto a la pantalla, incorpora un display de 5.3 pulgadas LCD con resolución QHD (2560 x 1440= y una densidad de 550ppi. Según la compañía, el principal fuerte de este componente estará en su uso en el exterior ya que ostenta 700 nits de brillo. La unidad estará a salvo de golpes y rayaduras gracias a la incorporación de un cristal Gorilla Glass 5 de Corning.
Por último, en lo que respecta a cámara trasera, el Nokia 8 posee un sistema compuesto por dos lentes de 13Mpx, siendo el principal de F2.0 con OIS, mientras que el secundario es de tecnología monocromática. En la parte delantera suma otro lente de 13Mpx con autofoco y display flash. Un dato interesante: todos los lentes son marca Zeiss.
HMD confirmó que el equipo correrá con una versión casi sin aditivos de Android 7.1.1 y sumará una tecnología llamada Bothie, que permite realizar transmisiones en Facebook, YouTube y otras plataformas usando al unísono las cámaras traseras y la delantera, mientras que el sonido es capturado usando la tecnología OZO de Nokia para audio de 360 grados.
El Nokia 8 estará disponible en el mercado europeo en septiembre a un precio de 600 euros (700 dólares). Por ahora, no está confirmada su fecha de arribo al resto del mundo.
Vía: PhoneArena