Luego de la crisis originada por la filtración de documentos del ex contratista Edward Snowden, pareciera ser que finalmente la Casa Blanca estaría tomando cartas en el asunto.
El presidente Barack Obama estaría listo para nombrar como nuevo director de la NSA al vicealmirante Michael Rogers, encargado de ciberseguridad en la Armada Estadounidense y especialista en encriptación de datos. Este nuevo nombramiento intentará salvar la seriamente dañada reputación de la agencia, luego de revelarse su esquema de vigilancia masiva a ciudadanos estadounidenses y extranjeros.
Una vez más, el nombramiento de un miembro de las fuerzas armadas echa por tierra la posibilidad de que la NSA tenga un directivo civil, como se venía especulando desde hace un tiempo.
Una vez realizado el nombramiento presidencial restará que el Senado estadounidense lo apruebe, y corrobore a Rogers como nueva cabeza de la NSA. De esta forma, el actual director de la agencia, el general Keith B. Alexander, dejaría su cargo tras nueve años de servicio.
El futuro director ha dirigido más de una decena de operaciones de ataque y de defensa informáticas, y ha liderado misiones de apoyo en criptología para unidades americanas en el golfo Pérsico y en el Mediterráneo.
Rogers tendría la dificil tarea de llevar adelante las reformas al organismo adelantadas por el mismo Obama durante enero, para dotar a la agencia de mayor transparencia.
Vía: FayerWayer, ElPais