El interés de Elon Musk por la Inteligencia Artificial, y su mirada crítica respecto a estas tecnologías, no son primicia. Según habíamos contado en agosto de 2014, el fundador de PayPal y Tesla Motors había publicado un tuit en el que decía: “Tenemos que ser muy cuidadosos con la Inteligencia Artificial. Es potencialmente más peligrosa que las armas nucleares”.
Ahora, Elon Musk se ha reunido con diversas personalidades del sector (Sam Altman de YCombinator, Ilya Sutskever de Google, Greg Crockman, anteriormente CTO de Stripe, además de inversores de fuste como Amazon Web Services, entre otros) para la creación de OpenAI, una organización sin fines de lucro que procura “avanzar en la inteligencia digital de una forma en la que sea más probable el beneficio de la humanidad en conjunto, y no con restricciones por la necesidad de generar beneficios”; en tanto, no presionada por el brazo comercial.
Siguiendo las líneas filosóficas del open source, OpenAI animará a investigadores a participar con la publicación de sus trabajos, compartirá en forma libre sus patentes y colaborará con otras instituciones del sector, según manifestaron sus impulsores.
Según señala Musk, la IA “debe ser una extensión de los deseos de los humanos”. Este hombre, considerado un gurú de la industria, indica que siendo OpenAI una organización sin ánimo de lucro, carece de obligaciones fiscales para centrarse así en “un impacto positivo para los humanos” que además pueda dar prioridad a los buenos resultados en desmedro de los intereses individuales.