La compañía noruega fabricante del navegador Opera, reafirmó su decisión de mantenerse como firma independiente, tras declarar que no quiere asociarse con otra empresa, aunque los grandes jugadores de la industria están intensificando la lucha en ese sector.
Cada vez son más los fabricantes de software que buscan hacerse un hueco entre los browsers, y tras la entrada de Apple y Google en este sector, los analistas especularon con la posibilidad de que Opera fuera adquirido por otra compañía.
Al respecto, el CEO de Opera, Jon Von Tetzchner dijo a Reuters que “somos más fuertes que nunca. Parte de la fuerza que tenemos procede del hecho de ser independientes. Si nos comprara alguien, probablemente se limitaría mucho nuestra capacidad para desempeñar el papel que tenemos“.
Opera lleva varios años desarrollando su navegador web, que actualmente se encuentra en la versión 9.64 para Windows, aunque también tiene presencia en el mercado de los navegadores para teléfonos móviles.
“Estamos en una posición en la que podemos hacer las cosas, tenemos una buena cantidad de dinero en el banco, y aunque la situación financiera mundial no es la mejor para invertir, no dudaremos en hacerlo si es necesario, concluyó von Tetzchner.