Según cálculos de la consultora Gartner las demandas energéticas de los centros de datos aumentarán en un 160% durante los próximos dos años. Como consecuencia el 40% de estas instalaciones tendrán problemas para conseguir un suministro estable en 2027.
La causa de este rápido aumento es el crecimiento de los proyectos de inteligencia artificial.
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Energía, computo e inteligencia
Los esfuerzos para mantener y mejorar a los modelos generativos han exigido mucho a los centros de datos. La industria ha crecido a gran ritmo pero aún así en muchos casos no ha logrado satisfacer la demanda. Y aunque crecieran a mayor ritmo existe un límite que no depende de los centros. Las proveedoras de energía no pueden expandir sus capacidades al ritmo que los centros necesitan.
De esta manera el límite de un sector se traslada al otro, y el de este al siguiente.
Gases
Por su parte, IDC ha apuntado que la demanda de trabajo que suponen las IA lleva a un incremento en el consumo de energía y, como consecuencia, a un aumento en las emisiones de dióxido de carbono.
Por esta razón muchas empresas se han apurado a asegurarse un suministro de energía dedicado, en varios casos con reactores nucleares. La energía nuclear en sí misma es bastante limpia, el tratamiento de los desechos es sencillo y seguro. Es probable que las empresas que utilicen energía de la red general sean vistas en el futuro como un competidor molesto que perjudica al conjunto de la población.