Desde hace más de tres décadas, cuando piensas en una aplicación para diseño gráfico, automáticamente viene a tu mente Photoshop. Esto no es extraño, ya que la continua evolución de la aplicación permite una amplia versatilidad y es utilizada en varias industrias no solo en el diseño gráfico.
Pero, últimamente, nuevos adversarios han entrado en escena ofreciendo un buen repertorio de herramientas, uno de ellos es Krita.
Autor: Pier Ciccariello
Herramientas gráficas
Conoce lo mejor de estas dos aplicaciones que te proporcionan todo lo que necesitas para hacer explotar tu creatividad.
A la hora de proveerte de herramientas para tu trabajo, Photoshop es una especie de “navaja suiza”. Si bien fue concebido principalmente para el retoque fotográfico, en la actualidad te permite desde manejar vectores, capas y objetos inteligentes hasta, en su versión beta, incluso la generación de contenido mediante inteligencia artificial.
También, hay que destacar su capacidad de interacción con todos los productos de Adobe Cloud, permitiéndote desde acceder a assets y recursos para utilizar en tus trabajos hasta el uso de otros programas con los cuales complementar las muchas capacidades de Photoshop.
Dentro de sus numerosos contrincantes en el mercado, Photoshop deberá competir contra Krita, una aplicación que tiene mucho que ofrecer. A continuación se brinda una comparativa entre ambas.
Krita y Photoshop poseen muchas funciones, aunque fueron concebidas con propósitos distintos.
Krita está pensada para pintar, dibujar y hacer sprites, mientras que Photoshop es más utilizada para editar imágenes y diseñar gráficos.
Precio
Muchas veces para utilizar una herramienta, sobre todo si eres un freelancer o un pequeño estudio, debes evaluar primero cuánto dinero tienes que desembolsar para usarla, ya que hay herramientas de software que son excelentes pero, para ciertos usuarios, resultan prohibitivas sobre todo con la nueva modalidad que adoptaron las empresas de vender licenciamiento sobre el software durante un tiempo.
Inicialmente, cuando comprabas un programa, este incluía su propia licencia y, mientras no cambiaras de versión, podías utilizarlo de por vida. En cambio, en la actualidad, el sistema de licenciamiento te permite emplear el software mientras pagues por él, de forma que, para utilizar ciertos programas, tendrás un costo fijo anual o mensual que debes tener en cuenta entre tus gastos y más si en tu flujo de trabajo utilizas varios programa de pago.
Photoshop tiene varios precios según las características de Adobe Cloud que desees utilizar, pero la más básica es de 22,99 dólares por mes, mientras que Krita es completamente gratis.
Aclarado este punto, también hay que resaltar lo que se esconde detrás de ello. Al ser de pago, Adobe puede invertir enormes sumas de dinero en mejorar su producto brindando nuevas y más estables funcionalidades, lo que se traduce en un artículo más elaborado y apto para el trabajo pesado.
Krita, por su lado, no cuenta con ese beneficio y se financia más bien de donaciones y de una enorme comunidad de colaboradores que aportan mejoras y assets, como tipos de pinceles y demás elementos que puedes descargar e incorporar. Esto no lo hace necesariamente un peor producto, pero sí marca una diferencia en la forma en cómo se financian las mejoras.
Requisitos de instalación
En cuanto a los requisitos mínimos y recomendados para instalar ambos programas, ahí las cosas comienzan a alejarse un poco. Si bien es cierto que Photoshop consume más recursos, también cuenta con más herramientas y potencia que no tiene Krita.
Como contraparte, este último es capaz de correr en ordenadores más viejos y con hardware más obsoleto, aunque evidentemente cuanto más libre de recursos se encuentren ambos programas mejor rendimiento presentarán.
En cuanto a Krita, los requisitos mínimos son 2 GB de memoria RAM, un procesador Dual Core de 1,6 GHz, una tarjeta gráfica “moderna”, de 2009 en adelante o gráficos Intel HD y, si bien se supone que como mínimo requiere Windows 8, es posible correrlo también en Windows 7 y 300 MB de espacio en disco.
Pero sus requisitos recomendados son 4 GB de RAM, un procesador Quad-core de 2.0 Ghz y una tarjeta de video capaz de manejar OpenGL 3.0 o superior y, nuevamente, 300 MB de almacenamiento en disco. Como podrás ver, en ambos casos los requisitos son irrisorios para los equipos actuales.
Dentro de las opciones de configuración del componente de Stable Diffusion, puedes seleccionar que el procesamiento lo realice la CPU o la GPU, incluso decidir qué clase de núcleo utilizar.
Para instalar Photoshop, las cosas son un poco diferentes, los requisitos mínimos son: procesador multinúcleo 2 GHz con SSE 4.2 o posterior compatible con 64 bits, 8GB de memoria RAM, GPU de 1,5 GB de VRAM compatible con DirectX 12, 20 GB de espacio de almacenamiento en el disco duro y Windows 10 de 64 bits, versión 20H2 o posterior, las versiones LTSC no son compatibles.
Además necesitas disponer de conexión a internet y estar registrado en Adobe para activar el software, validar las suscripciones y acceder a los servicios en línea. En cuanto a los requisitos recomendables, el procesador es el mismo, con 16 GB o más de memoria RAM, GPU compatible con DirectX 12 con 4 GB de memoria VRAM para pantallas 4K y que sean de una arquitectura menor a 7 años, así como 50 GB de espacio de almacenamiento en el disco duro.
Ten en cuenta que los requisitos de instalación no son los mismos que el programa consumirá en su trabajo, en ambos casos, intentando trabajar con esas configuraciones, tendrás más de un problema y cuelgues por no contar con recursos disponibles.
Herramientas y curva de aprendizaje
En cuanto a la disposición de herramientas, paneles y opciones, se puede decir que ambos son muy similares, ya que cuentan con una buena cantidad de herramientas, trabajan con capas, poseen más de 100 pinceles y la opción de incorporarles otros, complementos con los cuales mejorar el producto.
En referencia a la disposición del espacio de trabajo, también es bastante similar en ambos, ya que podrás encontrar un panel de herramientas izquierdo, un espacio para el lienzo en la parte central y paneles de configuración de herramientas en la parte derecha, así como una barra de menú en la sección superior.
Krita es capaz de leer los archivos PSD nativos de Photoshop, lo que te permite poder transferir tu trabajo de una plataforma a otra si fuera necesario.
Ambos programas cuentan con un número importante de herramientas así como con la posibilidad de potenciarlas mediante el uso de plugins. Sin embargo, en este aspecto Photoshop, al ser más famoso y muy utilizado en el mercado, dispone de variados tutoriales en internet, por lo que la curva de aprendizaje y el uso de trucos o técnicas para crear ciertos efectos pueden ser atractivos.
Por su lado, el uso de Krita, si bien cuenta con una enorme y activa comunidad, no dispone de tanta fama y esto se traduce en menos contenido para que aprendas a sacar verdadero provecho del programa.
Si se habla de trayectoria, Photoshop cuenta con más de tres décadas de liderazgo desde que apareció su primera versión en febrero de 1990 como un desarrollo de los hermanos Thomas y John Knoll, mientras que Krita, no tan conocido, nació el 21 de junio de 2005 como parte de una suite ofimática conocida como KOffice, diseñada para el dibujo y la ilustración digital.
Se debe tener en cuenta, también, el público objetivo de cada programa. Si bien un buen artista digital es capaz de hacer casi cualquier trabajo dominando correctamente un programa, lo cierto es que Photoshop fue desarrollado como una herramienta de retoque fotográfico, mientras que Krita fue pensada como una aplicación para realizar dibujos digitales, así como pixel art y sprites de videojuegos.
Actualmente, ambos programas han logrado evolucionar más allá de sus propios límites y es posible hacer casi lo mismo en ambos.
Inteligencia artificial
Últimamente, Photoshop ha innovado en su versión beta con la herramienta Generative fill, que permite crear contenido basado en comandos de texto introducidos al programa lo cual supone toda una revolución y un ahorro de horas de trabajo al generar contenido de la nada.
Esta tecnología, que aún no se ha perfeccionado al cien por ciento y todavía se encuentra en fase beta, se halla de forma nativa en la versión Photoshop 2024 Beta. En lo que respecta a Krita, no dispone de esta capacidad en su versión nativa, pero, gracias a que es un software de código abierto, puedes descargarle, desde un repositorio, algunas “mejoras” que le otorgan inteligencia artificial generativa de varios niveles.
Esta se puede ejecutar desde la nube, y cuentas con un número limitado de generaciones conocidas como tokens de creación gratuitos o, si dispones del suficiente poder de cómputo (nada exagerado por cierto), puedes generar a nivel local, al menos al día de hoy, ilimitadas imágenes mediante la inteligencia artificial, cosa nada despreciable.
En ambos programas, es posible utilizar comandos de texto o prompts para ingresar las órdenes que luego se transformarán en imágenes.
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