Los permanentes avances en el mundo del software a los cuales estás acostumbrado no dejan de sorprenderte, pero muchos de estos desarrollos no siempre tienen buenas intenciones. Existe una gran variedad de programas desarrollados para dañar tu equipo y la información que este contiene, como los virus informáticos, el malware y las múltiples piezas de software, que comprometen la seguridad de tus datos. Descubre, en este Informe USERS, las peores amenazas que aparecieron durante los últimos meses.
Autor: Pier Ciccariello
¿Qué es un virus informático?
Antes que nada, es buena idea poder definir qué es un virus informático. Se lo denomina de esa forma ya que tiene un comportamiento muy similar al de un virus biológico, ambos se contagian de una manera muy sigilosa, se replican en el huésped y toman el control de este haciendo que realice ciertas funciones sin saberlo.
Un virus informático no es otra cosa que un programa con código malicioso que infecta la computadora con el objetivo de alterar el correcto funcionamiento de un equipo, cosa que logra contagiando los archivos mediante un código maligno. Se caracteriza porque necesita de la intervención del usuario para ser ejecutado; luego, hace copias de sí mismo y, de esta forma, se propaga a través de la red, el correo electrónico, los pendrives y todo elemento que pueda contener o enviar código.
El objetivo principal de un virus es afectar una computadora y su rendimiento, destruir archivos y tomar el control a nivel remoto de tu equipo.
Si bien el término fue acuñado en la década de los 80, el primer virus informático fue creado en 1971 cuando el ingeniero Robert H. Thomas concibió el virus Creeper. Este no era un programa malicioso, simplemente viajaba sin hacer daño por la red ARPANET (red que luego se convertiría en algo llamado internet), replicándose a sí mismo y mostrando el mensaje Soy una enredadera… ¡atrápame si tú puedes! Años después, abriría la puerta para la creación de los virus como los conoces ahora.
Los virus informáticos son piezas de código similares a las usadas en los programas que generalmente utilizas, pero con fines dañinos.
Un virus informático no es otra cosa que un programa con código malicioso que infecta la computadora con el objetivo de alterar el correcto funcionamiento de un equipo, cosa que logra contagiando los archivos mediante un código maligno. Se caracteriza porque necesita de la intervención del usuario para ser ejecutado; luego, hace copias de sí mismo y, de esta forma, se propaga a través de la red, el correo electrónico, los pendrives y todo elemento que pueda contener o enviar código.
El objetivo principal de un virus es afectar una computadora y su rendimiento, destruir archivos y tomar el control a nivel remoto de tu equipo.
Si bien el término fue acuñado en la década de los 80, el primer virus informático fue creado en 1971 cuando el ingeniero Robert H. Thomas concibió el virus Creeper. Este no era un programa malicioso, simplemente viajaba sin hacer daño por la red ARPANET (red que luego se convertiría en algo llamado internet), replicándose a sí mismo y mostrando el mensaje Soy una enredadera… ¡atrápame si tú puedes! Años después, abriría la puerta para la creación de los virus como los conoces ahora.
En la actualidad, los malware tienen como objetivo lograr que los atacantes recauden importantes cifras de dinero por medio de la extorsión, ya que amenazan a las víctimas con no desencriptar sus datos o exponerlos públicamente.
Diferentes tipos de virus
Antes de seguir adelante, hay que aclarar que estás expuesto a varios tipos de virus de diferente índole, todos ellos desarrollados para perjudicar, en alguna forma, a tu equipo y a ti, por eso nada sería mejor que explicar algunos términos y generalidades de los distintos tipos de virus con los que ojalá no te encuentres.
Un usuario convencional posiblemente no se dé cuenta de que está infectado y, si lo hace, llamará “virus” a todo lo que lo afecta , pero esto no es del todo correcto, ya que hay nombres específicos para cada tipo de virus como verás a continuación.
- Malware: esta palabra se forma de la mezcla de malicious (malicioso) y software, y se utiliza para describir programas que ejecutan comandos con diferentes propósitos malintencionados, como invadir un sistema, eliminar información, robar contraseñas y tomar el control de servicios vitales del sistema.
- Gusanos: tienen la capacidad de autopropagarse sin necesidad de otro programa como sucede con los virus. Mientras un virus infecta un programa y depende de este para esparcirse, el gusano es autónomo y no necesita de otro programa para ser lanzado. Es posible que un gusano esté diseñado para emprender acciones maliciosas luego de plagar un sistema, ya que, además de autorreplicarse y consumir recursos del equipo, puede borrar archivos o enviarlos por correo electrónico. Aunque no realice una acción específica, solo el hecho de replicarse provoca una pérdida de performance por el tráfico de red adicional. Un claro ejemplo fue el gusano MyDoom, que en el punto más alto de su ataque, provocó que toda la internet se ralentizara. Cuando un gusano consigue penetrar en un equipo, intenta obtener las direcciones de las listas de contactos para enviarles copias y tratar de infectarlos también. No necesariamente manipulan algún programa ni hacen que el ordenador funcione incorrectamente, por eso son más difíciles de detectar.
- Troyanos: esta palabra deriva de Trojan Horse (Caballo de Troya), y recibe su nombre dado que funciona de forma secreta en la computadora. Suele ocultarse en un programa generalmente descargado por el usuario y, luego de instalado, ejecuta otros comandos sin su conocimiento.
Además del Cryptojacking, es común que los rescates a las víctimas de ransomware se soliciten en Bitcoins u otras criptomonedas porque resulta difícil rastrearlas.
- Rootkits: este tipo de amenaza incluye algunos de los más temidos malwares existentes ya que su principal misión es controlar el sistema operativo sin que el usuario lo sepa. Tienen la capacidad de ocultarse de la mayoría de los antivirus y, aunque en ciertos casos se detecte alguno de los archivos del rootkit, a veces puede dificultarse su eliminación. Los rootkits son el método más usado para invadir un sistema sin ser detectados.
- Spyware: es un tipo de malware que observa en silencio las actividades del usuario en la computadora y, sin que lo sepa, se las comunica al autor del software.
- Keyloger o registrador de pulsaciones de teclas: es un tipo de malware que graba todas las pulsaciones de teclas que hagas, las almacena y se las envía al atacante, que obtiene información acerca de las credenciales, como nombres de usuario, contraseñas o datos de la tarjeta de crédito.
- Cryptojacking o minería de criptomonedas maliciosa: es un malware cada vez más usado previamente instalado por un troyano. Permite que la computadora sea usada para hacer minería de criptomonedas, como bitcoin, para un tercero; utiliza tus recursos para enviar criptodivisas al creador del software.
- Exploits: son un tipo de malware que se vale de los errores y las vulnerabilidades de un sistema operativo para que el creador del exploit pueda asumir el control. Por lo general, están relacionados con cierta publicidad engañosa que ofrece instalar algún software que lo contiene; también están vinculados, entre otras amenazas, con la publicidad maliciosa, que ataca a través de un sitio legítimo que descarga contenido malintencionado desde un sitio peligroso. A continuación, el contenido dañino intenta instalarse en el ordenador tras una descarga involuntaria, ya que ni siquiera es necesario hacer clic.
Continúa leyendo el Informe USERS 204 y conoce los 5 malware más peligrosos; aprende a protegerte y detectar si tu equipo está infectado y qué hacer si lo está.
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